El Ayuntamiento de Bilbao admite que el dispositivo que mide la calidad del aire en Zorrotza no funciona

El Ayuntamiento de Bilbao ha aprobado hoy una moción realizada por Elkarrekin Bilbao en el pleno ordinario, por la que solicitarán al Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco la instalación "urgente" de dos medidores de calidad del aire, uno en Zorrotza y otro en San Ignacio-Elorrieta, con el objetivo de "poder medir pormenorizadamente las emisiones derivadas de la actividad industrial de las empresas Sader y Profersa".

Además, el Consistorio se ha comprometido a reinstalar, en un plazo de dos meses, el medidor municipal ubicado en Zorrotza en 2021, y que actualmente no funciona ya que se encuentra en proceso de reparación. En 2023, se colocó un medidor móvil adicional, pero fue "vandalizado" y "aún no ha podido volver a ser puesto en marcha", ha precisado la concejal de Movilidad y Sostenibilidad, Nora Abete.

Por otro lado, el Ayuntamiento aún se encuentra a la espera de recibir los resultados del captador de partículas de bajo volumen que se instaló en la la caseta de Medio Ambiente de la plaza Azoka de Zorrotza en 2022, si bien ha precisado que se conocerán "próximamente".

No obstante, asegura que el Ayuntamiento lleva a cabo "un seguimiento minucioso" y realiza "puntualmente, inspecciones por olores o actuaciones concretas cuando se produce alguna queja o llamada vecinal", si bien, ha subrayado que el Gobierno vasco "hace sus inspecciones, que indican un grado de cumplimiento alto", y es quien tiene la competencia para ello y quien determina dónde se ubican los medidores.

Ana Viñals, de Elkarrekin Bilbao, rodeada de vecinos frente a la empresa Sader. Elkarrekin Bilbao

Más medidores y más vigilancia

En vista de la falta de mediciones de Profersa y Sader, los grupos de la oposición han denunciado la "despreocupación" del Ayuntamiento de la capital vizcaína. La portavoz de Elkarrekin Bilbao, Ana Viñals, ha criticado que, "a día de hoy, no hay ni un solo medidor de calidad del aire operando en el entorno cercano de Sader y Profersa, ni tampoco, en alguno de los barrios directamente afectados por sus malos humos". Viñals ha asegurado que estarán satisfechos cuando "tengamos los tres medidores de calidad de aire operativos, controlando - cada día, cada hora y cada minuto - las emisiones de Sader y Profersa, velando por la salud pública de la ciudad".

El concejal de EH Bildu Karlos Renedo ha apostillado, además, que en la licencia de actividad de Profersa, se le exigía un "medidor continuo y esto no se está cumpliendo". El primer medidor debería colocarse en Elorrieta, indica, "en la infraestructura que ya existe, que está vacía, porque se retiraron los equipos". Reinstalarla en el mismo punto "daría continuidad a estudios anteriores tomados desde los mismos puntos de medición", argumenta. Y, el segundo medidor cree que debe instalarse en la isla de Zorrotzaurre.

En esta misma línea, el concejal del PP Ángel Rodrigo ha señalado que si el equipo de Gobierno fuese"realmente consciente del potencial peligro, si es que lo hubiera, y de los efectos que tiene una potencial contaminación en nuestra ciudad, no hoy, hace ya muchos años que hubieran puesto los medidores ahí para controlar si hay contaminación o no la hay, porque la realidad es que no lo sabemos, y no lo sabemos porque no hay medidores", ha denunciado.

Cumplimiento de la normativa

Ante la polémica en torno a la actividad de Profersa y Sader, ambas empresas, pertenecientes al mismo grupo pero con fábricas y actividades distintas, han emitido un comunicado en el que aseguran no haber sido nunca sancionadas por incumplir la normativa medioambiental y aseguran ser objeto de "frecuentes inspecciones no programadas en las que siempre han logrado alto nivel de cumplimiento".

Además, precisan que las emisiones no se corresponden con las dos empresas. Mientras que Profersa se dedica a la elaboración de fertilizantes, lo cual puede provocar malos olores y expulsión de vapores, Sader está enfocada en el tratamiento de residuos, una actividad industrial que no conlleva emisiones de humos o gases, sostienen.

Es por eso que desvinculan a Sader de este problema e informan de que, en el caso de Profersa, se realizan "mediciones quincenales por entidades acreditadas, conforme a su Autorización Ambiental Integrada (AAI), "cuyos resultados se encuentran dentro de los parámetros establecidos en la legislación medioambiental". Además, todas las mediciones realizadas hasta el momento por las redes de calidad del aire tanto fijas como móviles existentes y pertenecientes al Ayuntamiento de Bilbao y al Gobierno vasco, "no han identificado ningún impacto derivado de la actividad de Profersa", concluyen. No obstante, se muestran favorables a que las instituciones coloqune estaciones de control que midan la calidad del aire en su entorno que demuestren que cumplen con lo establecido y ayuden a reducir la preocupación de los vecinos.