El grupo Ganz-MaVag de Magyar Vagon ha lanzado la OPA para controlar el 100% del histórico fabricante de trenes con origen vasco Talgo. La compañía, con sede en Madrid, inicia así un proceso de cambio de manos (el accionariado ahora está repartido en un amplio abanico con el fondo Trilantic a la cabeza) en el que será determinante la presión que pueda ejercer el Gobierno español, contrario a la operación.
Este mismo jueves por la tarde el consorcio húngaro ha registrado la OPA en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), tal y como se ha hecho público en la propia web de la CNMV tras el cierre de la Bolsa, lo que significa solo el primer paso para tratar de hacerse con el control de la firma encabezada por Carlos de Palacio y Oriol.
Según se recoge en este aviso, la oferta se lanza a un precio de 5 euros por acción, lo que daría a Talgo una valoración total de algo más de 600 millones de euros y sitúa el precio bastante más arriba que el nivel actual de cotización de la acción en los mercados.
Oposición del Gobierno
Tras pronunciarse el ministro de Transportes, Oscar Puente, abiertamente en contra de la operación este miércoles, el titular de Industria, Jordi Hereu, ha indicado que Moncloa "defenderá" el proyecto industrial. Hereu ha dicho que se trata de una compañía "estratégica" por su papel "fundamental" en la movilidad ferroviaria del país y ha afirmado que el Gobierno la va a "defender" dentro del proceso de compra de Hungría.
"Talgo es una empresa que consideramos estratégica en el país porque tiene un papel en la movilidad ferroviaria fundamental. Siempre estamos (a favor de) defender los proyectos industriales y los puestos de trabajo", dijo el ministro.
Una vez activada la OPA la entrada de Magyar Vagon aun debe ser ratificada por las autoridades supervisoras y, en el plano político, habrá que ver si Moncloa opta por hacer valer el llamado escudo 'antiopas' para hacer descarrilar la operación. En cuanto al actual consejo de administración (la dirección de Talgo asegura que estudiará la oferta teniendo en cuenta la continuidad del proyecto industrial y el empleo en España), era conocido que el mayoritario Trilantic, con capacidad para decidir por hasta el 40% del capital, tiene gran interés en salir de la compañía y este mismo jueves los propietarios han dado a entender que la oferta es de su agrado.