La situación económica que atraviesa Siemens Gamesa ha ido empeorando durante los últimos años. Es por eso que a los trabajadores de la filial eólica de Siemens Energy en España los "ajustes de plantilla" anunciados por la dirección no les pillan de sorpresa. Así lo transmiten a Crónica Vasca: "Llevamos con ese runrún detrás de la oreja desde hace más de un año", aseguran.
Sin embargo, eso no resta "malestar" y preocupación" entre los afectados, tal y como coinciden UGT y CCOO, quienes reclaman al nuevo consejero delegado, Vinod Philip, "que apueste de verdad por el desarrollo de negocio en España, en todas sus unidades, tanto onshore como offshore, y que se mantenga el empleo de todos sus centros de trabajo, incluyendo sus centros productivos, centros de operación y mantenimiento, y de la cadena de valor formada por sus proveedores locales".
Esas dos condiciones están sobre la mesa de negociaciones con el Gobierno de España tras el apoyo mostrado por el Estado alemán a Siemens Energy tras anunciar unas pérdidas récord de 4.588 millones de euros en su ejercicio fiscal 2023, lastrada principalmente por su filial eólica. Así, el Ejecutivo central transmitió también su predisposición a avalar a Siemens Energy siempre y cuando garantice el empleo y mantenga los centros productivos que tiene en nuestro país.
En ERE hasta septiembre
Sin embargo, la incertidumbre no cesa y la amenaza de perder sus puestos de trabajo es algo que sobrevuela sobre los trabajadores, inmersos en pleno ERE. Desde enero de 2023, cuando entró en vigor el expediente de regulación de empleo de Siemens Gamesa, hasta septiembre de este año, cuando está previsto que finalice, serán 352 las personas que se acojan a una salida voluntaria, pero, sin embargo, la filial ha seguido ampliando su equipo, ya que, tal y como advierten los sindicatos, en los dos últimos años se han contratado a cerca de 250 nuevos trabajadores.
Una ampliación de plantilla que resulta "incomprensible" para los trabajadores teniendo en cuenta la evolución en descenso registrada desde que en 2020 el grupo alemán tomó el control total de Gamesa, tras adquirir la participación del 8% que tenía Iberdrola.
Así, en el ejercicio de 2020, la filial española de Siemens Energy registró unas pérdidas de 918 millones de euros; otros 626 millones en 2021; 937 millones en el año 2022 y, el año pasado, las pérdidas netas de ascendieron hasta los citados niveles récord tras detectar fallos en algunas de sus turbinas terrestres. En el último trimestre, Siemens Gamesa ha sumado otros 365 millones de euros a sus pérdidas y, para finales del actual ejercicio fiscal, calcula unos números rojos de 2.000 millones de euros aproximadamente.
No obstante, teniendo en cuenta que "el futuro de empresas como estas es un buen futuro, ya que va a haber inversiones privadas e inversiones públicas", desde CCOO solicitan a Siemens Energy medidas "temporales y no traumáticas" que permitan establecer un plan a largo plazo para el crecimiento rentable de su negocio eólico.
Próxima negociación
Ahora, el nuevo anuncio de reestructuración en Siemens Gamesa abre una etapa de negociaciones entre la dirección y los sindicatos "dentro de las próximas semanas" para tratar de paliar sus consecuencias en España. Aunque no han precisado cómo ni dónde se llevarán a cabo estos recortes, este mismo miércoles, en una reunión de la empresa con CCOO, UGT y ELA, han precisado a la plantilla que los países más afectados serán Alemania, Dinamarca y España.
Desde UGT FICA critican que se trata, una vez más, de un anuncio "parcial y sin información concreta", que genera "inquietud y desconfianza" entre los trabajadores. "Una vez más, el Comité Ejecutivo considera que la solución a los problemas de la compañía es un nuevo ajuste en el empleo, como si los anteriores ajustes hubieran resuelto algo", denuncian, y solicitan que la reestructuración que se haga se traduzca en recolocaciones dentro del grupo Siemens Energy.
Desde CCOO miran "con esperanza" hacia el futuro, ya que Siemens Energy ha comunicado que seguirá en activo tanto en el negocio onshore como offshore y que el área de servicios se mantendrá como un pilar importante, por lo que creen que seguirá habiendo necesidad de mano de obra en España.
La estrategia de la actividad offshore se centrará en aumentar la capacidad de producción, que actualmente sigue adelante en las plantas de Cuxhaven (Alemania), Aalborg (Dinamarca) y Le Havre (Francia). Con respecto a la actividad onshore ésta se concentrará principalmente en Europa y Estados Unidos, "mercados que ofrecen un marco regulatorio estable y en los que Siemens Gamesa puede satisfacer de forma óptima y rentable las necesidades de sus clientes", indican desde la energética alemana, que no descarta atender otros mercados locales "sólo si tiene sentido desde el punto de vista económico en cada caso específico".