Talgo ha comunicado a la CNMV que este miércoles ha recibido una notificación oficial de parte de Sidenor, compañía de José Antonio Jainaga, confirmando el interés en una compra "total o parcial" de las acciones de la compañía.
Se ratifica así que el industrial bilbaíno va a ser la alternativa, habrá que ver si la única, a la fallida OPA de Magyar Vagon, que el Gobierno de Pedro Sánchez vetó por las conexiones de la compañía con el Gobierno húngaro y a su vez con Vladimir Putin.
La nota enviada a la CNMV es sumamente breve y apenas aporta un par de novedades. La primera es que la oferta de compra la realiza el propio grupo Sidenor, es decir, Jainaga implica a su buque insignia en la operación. Queda así en un segundo plano el conglomerado empresarial Mirai, también de Jainaga y que anunció inversiones por valor de 400 millones de euros hasta 2026.
Otras incógnitas
La nota da a entender además que está abierta la puerta a que Jainaga asuma el 100% de la compañía. En concreto, Sidenor muestra su interés en una compra "total o parcial" del fabricante de trenes de alta velocidad, tal y como refleja el comunicado, lo que significa que la operación podría no estar acotada al 30% de las acciones de Trilantic, el accionista mayoritario a través de la sociedad Pegaso.
A partir de aquí comienza el 'baile' en torno al precio de la acción que se fijará para el cambio de manos, una negociación condicionada por el hecho de que la oferta húngara incluía la 'suculenta' cifra de 5 euros por título, un listón muy por encima del valor real que reflejan los mercados.
Por otro lado, Gobierno vasco y ejecutivo central siguen de cerca las evoluciones de cara a una posible participación en la operación, en el caso de Madrid a través de la Sepi mientras que el concurso de Finkatuz presenta más dudas. Se aclararía este último punto si el cambio de manos supone el regreso de la sede de Talgo a Euskadi, donde cuenta con 700 operarios en su planta principal de Rivabellosa.