Gestamp mantiene el nivel de ingresos en el tercer trimestre del año en relación al mismo periodo de 2023, aunque baja con fuerza el beneficio, en un contexto sumamente delicado para la automoción con una pérdida de velocidad en la fabricación de coches eléctricos.
"Nuestros resultados reflejan el momento incierto y volátil que está atravesando el sector y la ralentización en la transición al vehículo eléctrico, generando un escenario de inestabilidad. Este contexto nos ha llevado a reaccionar para optimizar nuestras operaciones en este entorno, en el que prevemos cerrar el ejercicio con un nivel de ingresos en línea con los objetivos", ha explicado Francisco Riberas, presidente de la multinacional vasca.
La firma con sede en Abadiño es una de las grandes multinacionales vascas de componentes de automoción y su resultado del año se ha visto lastrado por las incertidumbres en el sector, con gigantes como Volkswagen anunciando cierres de factorías en Alemania y ahora Michelin, líder en neumáticos, haciendo lo propio en Francia.
Trabajadora de Gestamp/Gestamp
Plan Phoenix
En tres meses Gestamp suma 2.787 millones de euros de facturación, en línea con el mismo periodo del año anterior, y en el acumulado del año (casi 9.000 millones de euros) se sitúa 6 puntos por encima de la media del sector.
La rentabilidad eso sí se ve lastrada por el contexto con una bajada del beneficio a 21 millones de euros frente a los 63 millones de 2023.
En cuanto al plan Phoenix, el programa anunciado por la empresa para relanzar el negocio en Estados Unidos y México, la aplicación del mismo evoluciona "de forma favorable" y la previsión es repetir Ebitda respecto al pasado año en un contexto de bajada en la fabricación de vehículos en esas zonas geográficas.