Protesta de trabajadores de Volkswagen en Alemania / EP

Protesta de trabajadores de Volkswagen en Alemania / EP

Empresas

BMW y Volkswagen se tambalean y la automoción vasca teme perder pedidos clave

Los gigantes alemanes son clientes preferentes en un sector tractor de la economía vasca con 300 empresas y 40.000 puestos de trabajo

15 septiembre, 2024 05:00

Por detrás del indiscutible liderazgo de Mercedes por el protagonismo de su fábrica de Vitoria, la automoción vasca vive en gran medida de otros dos grandes fabricantes alemanes de vehículos como son Volkswagen y BMW. Y ninguno de ellos atraviesa su mejor momento.

La automoción germana sigue acusando el punto de inflexión eterno en la transición hacia el vehículo eléctrico. La incertidumbre en torno al adiós al motor de combustión lastra las ventas comprometiendo el creciemiento de la economía del país y de la eurozona en general. La propia Mercedes Vitoria va camino de cerrar un 2024 con un volumen de producción inferior a lo previsto por la debilidad de la demanda en algunos de sus grandes mercados, entre los que destaca la propia Alemania.

Es previsible que la parte final del año vaya algo mejor en la factoría alavesa a medida que se consoliden los nuevos modelos lanzados recientemente en los concesionarios, aunque por ahora hay programadas paradas varios días también en octubre.

Con todo, el mayor susto lo ha protagonizado Volkswagen. El gigante con sede en Wolfsburgo, el primer fabricante europeo, ha advertido de que podría cerrar incluso dos fábricas para hacer frente a la bajada de ventas prevista estos próximos años.

Coches de Volkswagen / EP

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Volkswagen Navarra

El anuncio puede sonar a medida de presión para acometer ajustes controlados en los costes laborales, pero de momento ya ha metido el susto en el cuerpo a muchos proveedores vascos. La fábrica más cercana, la de Landaben en Navarra, se encuentra como Mercedes Vitoria en plena transición hacia los modelos eléctricos y camina este año a medio gas. Y el anuncio realizado por los máximos responsables del grupo en Wolfsburgo anticipa, cuanto menos, dos años más de ajustes en la producción en la que es pieza troncal de la industria navarra. La factoría próxima a la capital navarra ya sufrió consecuencias similares hace una década cuando se desató el llamado 'diéselgate', el caso que detectó falsificaciones en las emisiones de algunos modelos del grupo alemán.

La propia Landaben impulsa la actividad de algunas empresas vascas de menor tamaño, sobre todo en Gipuzkoa. Pero es que además Volkswagen es por sus volúmenes de producción cliente de cabecera de un buen número de compañías del sector de medio tamaño, además de contribuir a la cartera de pedidos de las dos grandes multinacionales vascas de componentes, Gestamp y CIE Automotive.

En el caso de BMW habrá qué ver cómo evoluciona el problema de fallos en los frenos detectado en algunos modelos que ha hecho desplomarse el valor de la compañía en Bolsa estos últimos días. La prestigiosa marca alemana mantiene lazos sólidos con un buen número de proveedores vascos.

Furgonetas en Mercedes Vitoria / Efe

Furgonetas en Mercedes Vitoria / Efe

La primera industria de Euskadi

La fabricación de vehículos tira de la actividad de unas 300 firmas vascas, según datos del clúster Acicae, que engloban un total de 120.000 puestos de trabajo, 40.000 de ellos en Euskadi. La facturación de sector, sin contar Mercedes Vitoria aunque con un elevado concurso de multinacionales extranjeras, suma más de 20.000 millones de euros al año.

Las cifras hablan por sí solas del potencial de una industria esencial en la economía vasca, como lo es también la factoría de furgonetas de la Avenida de los Huetos. Se estima que la mitad de las empresas de automoción en España tienen sede en el País Vasco. Otro de los protagonistas en el sector, la cooperativa Fagor Arrasate, acaba de recibir la visita de Pedro Sánchez en sus instalaciones en China, prueba de la relevancia que tiene el ecosistema vasco a nivel económico e institucional en el país.