Mercedes trazará su plan de producción en función del tirón de los nuevos modelos

La plantilla de Mercedes Vitoria volvía este lunes al trabajo tras las vacaciones de verano y lo hacía con el anuncio de nuevos paros programados para octubre. Paradas de producción -los próximos 11 y 18 de octubre- que se añaden a las ya fijadas entre dirección y comité en marzo con el fin de evitar un ERTE. 

El año no comenzaba bien para el fabricante de coches, después de un 2023 en el que el beneficio se redujo un 1,7% respecto a 2022, con problemas en la cadena de suministro y un aumento de costes de producción que no permitían dibujar un periodo de récord pese a los múltiples proyectos que en concreto la planta alavesa iba a llevar a cabo en 2024… Una inversión de mil millones de euros, la ampliación de la planta que iba a copar este monto y la producción de los nuevos modelos de la Vito y eVito que, en un principio, iban a permitir al grupo automovilístico alemán contar con márgenes para compensar los problemas de la inflación. Sin embargo, el paso de los meses y la persistente caída en la producción ha confirmado esta predicción negativa por la que se han tenido que desactivar hasta 31 días de trabajo en Vitoria. 

La esperanza ahora, tanto para la dirección como para el comité de empresa, pasa por la acogida que tengan en los concesionarios estos nuevos modelos de las famosas furgonetas de la marca alemana. Modelos con motores más eficientes y ecológicos, un diseño renovado y un sistema multimedia más avanzado. Su producción, como adelantó Crónica Vasca, arrancó en julio dirigida a llenar los locales de distribución de Mercedes con el objetivo de provocar el esperado efecto llamada. 

Desde el comité aseguran que “todavía no se puede calcular la repercusión que la salida a la venta de estos nuevos modelos ha tenido hasta día de hoy en la producción” puesto que los vehículos que se empezaron a producir en julio son los que ahora están expuestos en las tiendas. Esperan que esta exposición en los concesionarios “haga que suban los pedidos”, esto impulse la producción y puedan acercarse, “aunque aún no estamos a ese nivel”, a los números con los que trabajaban antes, 3.500 unidades al mes. 

Mercedes

Vistas a 2025

El comité está pendiente de reunirse con la dirección de la planta en los próximos días para cerrar y fijar un plan de producción de cara al próximo año 2025. Se reunirán seguros, afirman, de que “2024 lo van a solventar seguro, ya que entendemos que cuatro días de bolsa dan margen de sobra”. Y es que desde el comienzo de este año Mercedes ha parado su producción 31 días con cargo a las medidas de flexibilidad acordadas en marzo con la plantilla y que, por el momento, evitan la posibilidad de un ERTE. Tras ellas ya solo quedarán cuatro días de la bolsa de flexibilidad.

Quedan por tanto pendientes de si el segundo semestre del año y el arranque de producción de estos novedosos modelos harán revertir la incómoda situación por la que atraviesa la mayor planta vasca, con en torno a 5.000 trabajadores, y las consecuencias negativas que esta ha tenido en los últimos meses como sus afecciones en las exportaciones vascas.