Instalaciones del Puerto de Bilbao donde se ubica Bahía Bizkaia Gas (BBG)
Rusia y Estados Unidos se han consolidado en los últimos años como los dos grandes vendedores de gas natural a Euskadi, donde atracan buena parte de los metaneros que llegan a España. El Puerto de Bilbao recibe el gas en forma líquida (GNL) y lo trata en Bahía Bizkaia Gas (BBG) antes de devolverlo a la red, de forma que una parte se queda en Euskadi y otra viaja a otros puntos de la península.
Lo cierto es que, pese a que resuenan tambores de descarbonización y la transición hacia las renovables ocupa un hueco preferente en la agenda política, el gas sigue teniendo un papel crucial en el modelo energético.
Según datos del Ente Vasco de la Energía (EVE), el repunte en el consumo de gas en noviembre anuló el descenso producido en el uso de esta fuente de energía hasta el undécimo mes del año.
Así, a falta de computar diciembre el consumo de gas incluso creció ligeramente, aunque los datos del EVE presentan importantes matices. En el acumulado de los once primeros meses del año baja el uso de gas en la industria y, en especial, en las centrales térmicas para su conversión en electricidad como la que se encuentra precisamente junto a BBG, en el propio puerto.
Planta de Enagás / EP
Almacenes y envíos a otras zonas
No hay en ese sentido una relación entre la menor llegada de gas a Euskadi y el consumo energético. Los récords de descargas de los últimos años tenían que ver con un contexto global complejo con una fuerte demanda también de otros puntos de España, en algunos casos para contar con la 'despensa' llena como ocurrió con La Gaviota en el verano de 2022.
Y hay otro factor que reduce la importación de gas natural como es la puesta en marcha por parte de Enagás de la planta de gas de El Musel, en Asturias, que ha restado algún buque a Bilbao en 2024.
Un buque gasero escoltado por dos patrulleras / BBG
Así, el volumen de gas natural llegado a Euskadi el pasado año (entre enero y octubre) por distintas vías, principalmente marítima, fueron 700.000 toneladas, muy por debajo del casi millón y medio de toneladas del mismo tramo de 2023.
En ese descenso permanecen como grandes proveedores Rusia, en primer lugar, y luego Estados Unidos, con un papel creciente en el suministro energético a Euskadi en los últimos años, que copan prácticamente la totalidad de los envíos en este segmento.
Quedan fuera así, según los datos de Eustat, otros proveedores de peso que sí aportaron cantidades importantes de gas de petróleo en 2023 como Argelia, Nigeria, Perú o Trinidad y Tobago, que llegaron a llevarse un 40% de la tarta ese año (con todo, Estados Unidos y Rusia coparon el otro 60% de los envíos).
