La anunciada espantada de Guardian de Llodio, donde la multinacional fue el gran tractor industrial en el pasado, cierran un círculo negro para la industria vasca. Hay que recordar que la parte que se desgajó hace unos años del gigante norteamericano del vidrio en el Valle de Ayala, Glavista-Autoglas, acabó en concurso tras pasar a manos de un fondo.
Precisamente Glavista era la beneficiaria principal de dos líneas de ayudas del programa para la innovación del Gobierno vasco Hazitek, para ejecutar en 2023, enfocadas a la creación en Llodio de un hub del vidrio (Laudio Glass Hub) aprovechando la presencia de varias firmas relevantes del sector en la comarca, como la propia Guardian, Trabeira o Vidrala.
La idea era "posicionar a Laudio a nivel europeo como la ciudad del vidrio", un proyecto que estaría arropado por otras iniciativas para la comarca como el abastecimiento de energía limpia a través del hidrógeno.
Instalaciones de Glavista.
Desde el departamento de Desarrollo Económico que en las legislaturas de Iñigo Urkullu dirigía Arantxa Tapia se pusieron 2,5 millones de euros repartidos en tres proyectos (el tercero era de la vizcaína Vicrila), aunque solo llegó a abonarse una pequeña parte. Además la Diputación de Álava anunció su respaldo económico con otros 3 millones más.
Según información facilitada en el Parlamento Vasco a finales del pasado año por el actual consejero de Industria, Mikel Jauregi, de los dos programas de Glavista (unos 100.000 euros en total) se habría recuperado en torno a la mitad. Dentro de esos planes de innovación encabezados por Glavista se incluía la participación de otras firmas de Aiaraldea como Trabeira o Ingenet, que han tenido que devolver su asignación pese a haber justificado la realización de su parte del proyecto.
En el caso de Vicrila, en Leioa, la cuantía abonada fue más pequeña, algo menos de 20.000 euros.
Ni desde finales de 2022 ha habido nuevas informaciones relativas a esta iniciativa ni el actual Gobierno especifica en su respuesta parlamentaria al PP si ha habido nuevos pasos en torno al hub del vidrio en 2024 en el marco del Plan de Actuación Inmediata para la Comarca de Aiaraldea. Este mismo miércoles EH Bildu pedía a Lakua y diputación la implementación de dicho plan, del que recordaban la mínima ejecución de las ayudas para crear el hub.
Arantxa Tapia, con Pradales y Díez Antxustegi
Un cierre por capítulos
El actual gobierno de Imanol Pradales no ha ocultado su preocupación estos días por el anuncio de Guardian de cerrar la factoría alavesa, una decisión que si no hay una solución de por medio se materializará en seis meses dejando en el aire casi 200 puestos de trabajo.
La 'fuga final' de la multinacional americana se encadena con el triste desenlace de la parte del negocio de cristal para parabrisas, que tras la venta al controvertido fondo suizo Parter ha acabado en un ERE para toda la plantilla. Dos procesos que no dejan de ser parte de un mismo adiós, el de Guardian Glass, que llegó a contar con más de un millar trabajadores en Llodio.
Vidrala
La comarca del Valle de Ayala va camino de perder así una de sus grandes referencias en el histórico sector del vidrio, por otro lado intensivo en consumo de gas y castigado en los últimos picos de precios energéticos. En cuanto a Vidrala, hay que recordar que la firma de los Delclaux anunció a finales de 2023 el cierre de uno de los hornos de la factoría de Llodio, decisión que afectaría a parte de la plantilla de las instalaciones alavesas.
Una pérdida de peso que dificulta el poder recomponer o recuperar más adelante ese anhelo del anterior Ejecutivo vasco de situar a Laudio como capital europea del vidrio.