Ibernova ayuda a digitalizar el sector bodeguero con la trazabilidad de más de 100.000 barricas de vino

Aunque la elaboración de vino está basada en procesos ancestrales, también requiere de innovadores sistemas que ayuden al sector bodeguero a adaptarse a los nuevos tiempos. Y, con este cometido, la compañía vasca Ibernova, división industrial de la  antigua Ibermática, ha desarrollado una tecnología ad hoc para ayudar a digitalizar Bodegas Campo Viejo y Bodegas AGE y catalogar sus más de 100.000 barricas.

Con etiquetas RFID, códigos QR y bases de datos en tiempo real, ambas bodegas pueden conocer con precisión la ubicación y el momento de su vida útil en el que se encuentra cada una de sus barricas.

Este registro digital y en tiempo real hace posible que desde dentro de la bodega "llevemos un control preciso de la ubicación y el estado de cada una de nuestras 100.000 barricas, permitiéndonos conocer en qué fase del proceso se encuentra cada una garantizando una trazabilidad total desde su recepción hasta el final de su ciclo de vida", destaca Ixaka Zubieta, Viti-Wine Manager de Bodegas Campo Viejo y Bodegas AGE.

Sala de barricas.

Mediante dispositivos instalados en las carretillas, los operarios de estas bodegas pueden acceder, incluso en aquellas zonas con baja conectividad, a la información, que se actualiza cada 15 segundos y se sincroniza con las bases de datos, explica Mikel Nicolás, IT Project Manager de Campo Viejo y AGE.

Mantenimiento predictivo

Además, la creación de una API para la integración de estos datos con el ERP de la bodega posibilitará "optimizar los procesos logísticos y productivos, facilitando la toma de decisiones basada en información precisa y en tiempo real". Una información muy valiosa para detectar con antelación las necesidades de producción y garantizar una mayor eficiencia a largo plazo.

En este sentido, el sistema de gestión de barricas diseñado por Ibernova abre la puerta a implementar sistemas de mantenimiento predictivo a través de hardware a partir de la información recabada. "Con los datos que recopilamos, podríamos anticiparnos a posibles incidencias y seguir optimizando la eficiencia de nuestras bodegas", señala Nicolás.