Tren de CAF Europa Press
Alstom recurre de nuevo el megacontrato de CAF en Bélgica de hasta 3.400 millones
El Consejo de Estado belga se pronunciará de nuevo el próximo 29 de agosto sobre esta elección
La plantilla de Alstom empieza parones por el desacuerdo con el 'megacontrato' de CAF
Nuevas noticias en el marco del megacontrato de CAF en Bélgica, por el que hay en juego hasta 3.400 millones de euros. El pasado 23 de julio se conocía la decisión del consejo de administración de SNCB: aunque no suponía el cierre de la operación, CAF era la elegida para suministrar los 600 trenes para renovar la flota de la compañía ferroviaria belga.
Una decisión que todavía puede ser revocada por el propio ejecutivo belga y que no ha sido bien encajada por la principal competencia de la compañía española, la francesa Alstom, cuyos trabajadores en Bélgica han convocado paros y que ya ha presentado un nuevo recurso.
Así, según avanza EFE, el Consejo de Estado belga se pronunciará de nuevo el próximo 29 de agosto sobre esta elección. Un movimiento que se espera con ansias desde la firma francesa: "Confirmamos que Alstom sigue ejerciendo sus derechos legales ante el Consejo de Estado de Bélgica en relación con esta licitación", ha indicado la portavoz de Alstom, Caroline Courtin.
Precisamente el lunes de esta semana la plantilla de la fábrica de Alstom en Brujas (Bélgica), en la que trabajan unas 600 personas, llevó a cabo un paro espontáneo en protesta por la decisión de la compañía ferroviaria belga SNCB de elegir a CAF como oferta preferente para el suministro de nuevos vagones.
Decepción en Alstom
La decisión del Consejo de Administración de la SNCB, que optó por la española por delante de Alstom y de la alemana Siemens, fue suspendida temporalmente por el Consejo de Estado de Bélgica por considerar que el proceso de adjudicación había sido poco transparente.
Sin embargo, el pasado junio la SNCB volvió a confirmar a la CAF como su oferta preferida tras una nueva evaluación del consejo de administración -conforme había establecido el Consejo de Estado-.
Una confirmación que ha causado decepción en la firma francesa dada su imortante presencia precisamente en el país belga, donde, aseguran desde Alstom "corren en riesgo cientos de empleos".