Se avecinan unas navidades movidas para las áreas del Gobierno vasco más sensibles al mundo económico y empresarial. En unos días se celebrará esa esperada reunión de accionistas para cerrar la entrada de José Jainaga en Talgo y al borde del final del año se puede concretar también la compra de Uvesco.
En ambas operaciones se juega mucho el Ejecutivo de Imanol Pradales. Talgo ha sido la primera gran apuesta del lehendakari por devolver a Euskadi el centro de decisión de una gran empresa y los supermercados BM son un quebradero de cabeza del consejero Mikel Jauregi desde que asumió el cargo.
El propio Ejecutivo, como informó Crónica Vasca, hizo gestiones activas en su día para dar con un socio principal alternativo a Carrefour cuando la cadena francesa se interesó en Uvesco, incluso tanteando a cadenas de fuera de Euskadi.
Meses después ha sido el paso adelante de los directivos con Ángel Jareño al frente el que ha permitido canalizar una oferta que puede ser suficiente para PAI Partners.
El actual CEO cuenta con el respaldo de Kutxabank a través de su nueva sociedad de inversión Indar, así como de Inveready y Stellum, que darían otro bocado al capital.
Ángel Jareño, a la izquierda, junto a José Ramón Fernández de Barrena, presidente de Uvesco
Discreción ante todo
"Estar en los medios nos ha hecho daño". Jareño se refería así recientemente en un acto de la Universidad de Deusto, en la que estudió, al impacto mediático que tuvo el intento de compra de Carrefour.
Es la frase que mejor condensa el perfil del directivo guipuzcoano, que lleva la discreción por bandera. Estar fuera de foco para concentrarse en la gestión.
Ahí Uvesco ha logrado liderar a través de BM y Super Amara lo que puede considerarse el sector 'premium' de la distribución en Euskadi y su entorno, con gran peso del producto fresco y marcas reconocidas de cierto nivel adquisitivo, lo que permite ensanchar los márgenes de rentabilidad sobre la competencia.
Ángel Jareño, CEO de Uvesco, en la parte superior de la imagen.
Jareño estudió Económicas en Deusto, hizo un PDG en la IESE Business School y retornó a La Comercial para rematar su formación con un doctorado.
Inició su etapa profesional en el mundo de la auditoría para pasar pronto al mundo industrial, en concreto a la dirección de la navarra Savera (piezas para elevadores y escaleras mecánicas), y luego a la compañía de supermercados con sede en Irun, de la que es CEO desde hace más de tres años.
José Jainaga, en la entrega del Premio Korta.
Un imperio empresarial
Más recorrido mediático tiene José Antonio Jainaga, el empresario de moda a nivel nacional en el último año.
El industrial bilbaíno es ingeniero de formación, trabajó en Sener y Michelin antes de llegar a Sidenor y 'marcarse un Talgo', el primero de su trayectoria empresarial, comprando la empresa a la brasileña Gerdau.
Comparte con Jareño el rigor en la gestión, la ambición personal y profesional necesaria para encabezar este tipo de aventuras y, sobre todo, una gran capacidad de trabajo, como comparten sus círculos cercanos.
Jainaga con Imanol Pradales
Jainaga tiene ese toque bilbaíno, 'echao pa alante', que le llevó incluso a aparecer en las quinielas para presidir el Athletic.
Habla poco públicamente pero cuando lo hace su voz resuena con fuerza en el sector industrial. Propuso hace unos años unir todas las acerías vascas en una. No prosperó su apuesta pero ha encontrado otras maneras de construir un imperio empresarial.