¿Algo que representa más a Euskadi que los pinchos? Estas pequeñas obras de arte culinarias llevan años formando parte de los mejores aperitivos de los vascos y no han dejado de hacerlo. Al igual que las tapas, estos pequeños bocados son unos imprescindibles en España, pero no deben confundirse.
Se le llama 'pintxo' a un alimento o ración de comida sujeta con un palillo y que se coloca sobre una rebanada de pan, según la web de Bizkaia Talent en su artículo Los pintxos como seña de identidad de la gastronomía vasca. Lo que diferencia a un pintxo de las tapas es que estas últimas son pequeñas raciones de comida que se sirven junto con la bebida en muchas zonas de España y de manera gratuita, mientras que el pintxo se sirve por separado, hay que pedirlo y cuesta dinero. Además, los pintxos requieren una mayor elaboración y generan una explosión de sabores en la boca.
Son muy populares el Bilbainito o el Grillo en Bilbao, sin embargo, uno de los más icónicos y antiguos es la famosa Gilda, que se elabora con tres ingredientes: antxoa, aceituna y piparra. Una creación que nació en el bar donostiarra de la calle Los Reyes Católicos número 10, Casa Valles, en la década de los 40.
La mejor ruta de pintxos de Bilbao
No pueden faltar en las barras de Euskadi. Cada día, los vascos consumen decenas de pintxos. Algunos no los toman para el aperitivo, sino que se dedican a realizar rutas para probar y, de paso, tener la comida lista. En Bilbao esto es toda una tradición y, por ello, el instagrammer @maikandfood no ha dudado en ofrecer una ruta de pintxos por la villa por menos de 12 euros y por los bares más emblemáticos.
La ruta comienza en el bar Ardibeltz de la calle Barrenkale Barrena número 18, donde el instagrammer ha probado minitalos de chorizo muy sabrosos y bien elaborados por 3,50 euros. Cuentan con sabores "innovadores", como chorizo y burrata, costilla ahumada con salsa vizcaína y "toques crunchy".
Después ha acudido a Sorginzulo, en la Plaza Nueva, ganadores de la mejor tortilla de patata de Bizkaia este año y donde se ha decantado por un exquisito bao de bacalao por 2,90 euros. A continuación se ha desplazado al clásico La Olla, también en la Plaza Nueva. En este local ha probado un mousse de queso, salmón y plátano servido en una cáscara de huevo por 2,90 euros. "La mezcla suena un poco rara, pero está buenísima".
No podía no pasar por el mítico El Globo, en la calle Diputación número 8. Se trata de un local antiguo, muy querido y famoso por sus cremosos pintxos gratinados. En este ha probado su clásico pintxo de txangurro gratinado por 2,40 euros y el de txipirones en su tinta.