Una de las sidrerías más antiguas de Euskadi. Astarbe Sagardotegia
Una de las sidrerías más antiguas de Euskadi sigue abierta y parece sacada de un cuento: el mejor chuletón y sidra desde el siglo XVI
Rodeada de ocho hectáreas de manzanos que nutren el caserío en el que se halla la sidrería, un gallinero, una cuadra y una huerta, se corona como una de las leyendas de la buena comida.
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Euskadi es conocido por ser la tierra del buen comer, donde no solo sorprenden los restaurantes de alta cocina o las barras repletas de pinchos, sino sus populares sidrerías o sagadotegis. Espacios únicos donde disfrutar de una buena sidra o sagardo al ritmo de un chuletón.
Una experiencia gastronómica inigualable que combina la sidra sacada directamente de los barriles con menús en los que figuran sus estrellas: la tortilla de bacalao o el chuletón, o los dos. La más pura esencia vasca de la que se puede disfrutar en una de las sidrerías más antiguas del País Vasco: Astarbe, en la localidad de Astigarraga (Gipuzkoa).
Astarbe, una de las más antiguas
Rodeada de ocho hectáreas de manzanos que nutren el caserío en el que se halla la sidrería, un gallinero, una cuadra, un desván, una bodega de 1823 y una huerta, Astarbe se corona como una de las leyendas de la buena comida y de la sidra más antiguas de Euskadi.
La sidrería, que guarda un Solete de la Guía Repsol (la más popular de la gastronomía española), ofrece un estupendo menú por 49,50 euros a base de un aperitivo de la casa, tortilla de bacalao elaborado con huevos de corral, bacalao con cebolla y pimientos o bacalao en salsa verde, una jugosa y deliciosa txuleta con ensalada o txuleta local (según disponibilidad) con ensalada, degustación de quesos vascos con mermelada de manzana y sidra. Pan y agua, sidra al txotx y café.
Además de este menú se puede optar por otros maravillosos platos de la carta, como las famosas hamburguesas de txuleta.
Pero, sin duda, una joya que no falta nunca sobre la mesa del comensal es su sidra natural. Artesanos de la manzana y de la sidra elaborada tradicionalmente desde el año 1563, esta forma parte de la esencia del local. Desde la web oficial del restaurante apuntan que cuidan de su manzano durante todo el año para ofrecer los mejores resultados en otoño.
Sidra de Astarbe. Astarbe Sagardotegia
"Tras la vendimia manual, seleccionamos las unidades con un estado óptimo de madurez. Tras una elaboración artesanal embotellamos nuestras sidras y las dejamos madurar en la botella", añaden. "Después de tres meses de reposo, la sidra está preparada para su consumo".
La experiencia que se vive en Astarbe es un ritual "auténtico vasco" que brinda la oportunidad de "sumergirse en nuestra cultura, ser parte de ella". El trabajo de sus proveedores, así como la atención del personal y "el mimo de los cocineros, están a su servicio".
