El 48,2% de las mujeres residentes en Euskadi de entre 16 y 85 años -449.295 mujeres- ha sufrido algún tipo de violencia (física -incluida amenazas-, sexual y/o psicológica) dentro o fuera de la pareja alguna vez en la vida.
Esta es una de las principales conclusiones que ha dejado la Encuesta de violencia contra las mujeres y otras formas de violencia interpersonal, presentada por Gobierno vasco y Emakunde este viernes.
Se trata del primer estudio oficial que se realiza en Euskadi con el objetivo de medir la magnitud de este problema y recopilar datos sobre la frecuencia con la que las mujeres sufren distintas formas de violencia, por el hecho de ser mujeres, en cualquier ámbito público o privado, lo que incluye entre otros, los ámbitos de pareja, familiar, laboral, educativo, comunitario y el entorno virtual.
Estudio que deja otros datos como que del total de mujeres que han sufrido violencia de algún tipo, que traducido a cifras serían cerca de 450.000 víctimas, más del 81% lo han contado a familiares o amistades, pero únicamente el 14 % lo ha denunciado.
Además, el 7,4% de las mujeres residentes en Euskadi de entre 16 y 85 años han sufrido algún tipo de violencia (física -incluida amenazas-, sexual y/o psicológica) recientemente, es decir, en el último año. Es decir, 68.949 mujeres.
Tres de cada diez ha sufrido violencia psicológica por su pareja
Los datos referidos a violencia en el ámbito de la pareja o ex pareja indican que el 13,5% de las mujeres han sufrido violencia física (119.442 mujeres); el 8,3% violencia sexual (73.743 mujeres), y el 28,6% violencia psicológica (253.788 mujeres).
Entre este grupo destaca que el 9,5% viven con miedo constante a su pareja o ex pareja, lo que supone un indicador de la "severidad de la violencia" que padecen.
En el caso de la violencia ejercida fuera del ámbito de la pareja, el 15,7% de las mujeres (146.651 mujeres) han sufrido violencia física y el 26% violencia sexual (243.494). En la mitad de los casos, el autor era una persona conocida.
El 18,4% de estas mujeres manifiesta que ha recibido asistencia médica o psicológica y un 17,3% considera que debería haberla recibido, pero no fue así. Mientras que el 63,8% mantiene que no ha necesitado ese tipo de asistencia.