Situado en el extremo más occidental de Álava, el de Valderejo es uno de los parques naturales de Euskadi más ricos en diversidad de ecosistemas. En sus 3496 hectáreas se encuentran escarpes rocosos, valles fluviales, una cascada, frondosos bosques, brezales...
No es de extrañar que en 1992 fuera declarado Parque Natural. Además, cuenta con otras figuras de protección. Es Zona de Especial Conservación (ZEC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
Hogar del buitre leonado y otras especies
La singularidad de la flora y la fauna que habitan en sus límites hace de este enclave uno los más preciados de la geografía vasca. Sirve de hogar a distintos tipos de aves rupícolas. Además de la colonia de buitre leonado más numerosa de todo el País Vasco, en este parque habitan águilas reales, alimoches y halcones peregrinos. A la lista se suman ejemplares de vencejo real y de piquirroja, entre otros.
Para avistarlos, se han creado recorridos ornitológicos, como el de la subida a San Lorenzo y el del desfiladero del Purón. Este último se incluye dentro de una senda trazada en paralelo al río al que debe su nombre.
Más difícil resulta ver a los corzos, uno de los mamíferos de mayor tamaño de la zona. Sus hábitos nocturnos y el que frecuenten los bosques más cerrados impiden a los visitantes poder cruzárselos en su camino.
Especial interés despiertan las orquídeas que crecen en los parajes de monte. Se han contabilizado hasta 40 especies diferentes. Todas ellas de gran belleza y no exentas de atractivos. Los pétalos de algunas se asemejan a las hembras de distintos insectos. Es su modo de atraer a los machos para lograr la polinización.
Un espacio natural perfecto para disfrutar en familia
La oferta de actividades en el parque de Valderejo es tan amplia como variada. Es el lugar ideal para llevar a cabo planes en familia. Harán las delicias tanto de los más pequeños de la casa como de los adultos. Solo es necesario elegir alguna de estas propuestas.
1. Una visita a la Casa Parque
Este centro da a conocer el patrimonio natural del que goza Valderejo. Entre los elementos que alberga su exposición interpretativa, destaca la maqueta de la carroñada.
2. Un recorrido por su etnografía
El Parketxe no es el único equipamiento educativo abierto a las familias. El Museo Etnográfico les ofrece la posibilidad de ahondar en su pasado. Es una de las escalas del recorrido interpretativo trazado por otros elementos. En él se incluyen el lavadero, la bolera, el reloj de sol de la iglesia, etc.
3. Un pícnic en plena naturaleza
El área recreativa es escenario de pícnics que reúnen a varias generaciones. Dispone de barbacoas y merendero. Completa sus instalaciones un área de juegos para los niños.
Sendas para recorrer en bicicleta o a pie
Los amantes del deporte tienen la oportunidad de practicar diferentes modalidades en este parque. El Centro BTT Valderejo-Añana es el punto de partida de rutas sobre ruedas que suman 120 kilómetros.
El senderismo es el rey con cerca de una decena de propuestas. Pueblos en ruinas o llenos de vida, el menhir de Lerón y la gran riqueza de la naturaleza convierten a estos recorridos en experiencias memorables.
El parque natural de Valderejo recibe a los visitantes para ofrecerles la posibilidad de llevar a cabo diferentes planes. En solitario, en cuadrilla o en familia, las alternativas son irresistibles.