¿Qué lugar ocupa Bildu en la izquierda vasca? ¿A la derecha de Elkarrekin Podemos? ¿Tal vez, incluso, a la derecha del PSE-EE? ¡Está usted loco! ¡Cómo va a estar Bildu a la derecha del PSE-EE! Pues envido más. A ver si va a resultar que Bildu es más de derechas que... ¡el PNV! 

Me explico con tres ejemplos. 

Primero. Una importante manifestación recorrió las calles de Bilbao el sábado, en defensa de la Escuela Pública Vasca y en contra del borrador de la futura ley de Educación. Convocaba la plataforma Euskal Eskola Harro Topagunea de la que forman parte LAB, STEILAS, CCOO y ESK, además de sindicatos estudiantiles y asociaciones de padres y de alumnos, y que contó además con la adhesión ELA.

Protestaban porque entienden que la nueva Ley de Educación equipara la financiación de la escuela pública con la de la privada, y eso arrincona a la primera y la va desvalorizando paulatinamente a favor de los colegios privados concertados. Eso piensan los convocantes y también Elkarrekin-Podemos, que acudió a la manifestación.

El PNV, que promueve la ley, pasó del asunto y el PSE-EE, que gobierna en coalición con ellos pues, de momento, oír, ver y callar ¿Y Bildu? ¿Dónde estaba Bildu el sábado? No estaba 

¿Puede haber algo más de izquierdas que la defensa de la escuela pública? ¿Y puede haber algo más de derechas que la defensa de una red de colegios privados concertados frente a lo público? ¿Una patronal privada y concertada llamada Ikastolen Elkartea? 

Parece que Bildu, en el tema educativo, se alinea con el PNV e Ikastolen Elkartea y no con la escuela pública. Ramalazo integrista

Porque señoras y señores, la Federación de Ikastolas agrupa a colegios privados y concertados, como los del Opus Dei o los de los jesuitas. La Federación de Ikastolas son los colegios que se quedaron fuera, voluntariamente, del proceso de publificación, auspiciado y acordado con los agentes correspondientes, por el consejero de Educación Fernando Buesa, allá por 1993. Un proceso con el que se cerraba cualquier pretensión sobre una tercera vía educativa abertzale y euskaldun ¿O no? Porque parece que Bildu, en el tema educativo, se alinea con el PNV e Ikastolen Elkartea y no con la escuela pública. Ramalazo integrista.

Segundo. Euskadi importa el 90% de la energía que consume. Compramos a precio de mercado la energía producida por las nucleares francesas o el gas del fracking de los USA que llega en barco a nuestros puertos. Es el precio hipócrita a pagar por no tener nucleares y por no explotar los supuestos yacimientos de gas alaveses. Correcto desde el punto de vista ecologista y progresista. 

Pero las Cumbres del Clima nos urgen y nos avisan. El planeta se acaba. Es necesario un cambio de paradigma en agua, residuos, energía, alimentos,… Un cambio urgente, por cierto. Ante esta emergencia tenemos, también en Euskadi, a los negacionistas, que dicen que no pasa nada mientras la orquesta del Titanic entona “Nearer, my God to Thee”.

Luego están otros más listos, llamados delayers climáticos que no niegan lo que está ocurriendo, pero que le quitan la urgencia y piden una gradación sensata de las medidas que se vayan a adoptar. No vayamos a correr demasiado y provoquemos más daños que beneficios. Un destacado miembro de este club en Euskadi es el presidente de Repsol, Josu Jon Imaz.

Bildu tiene en su cuerpo de votantes y simpatizantes a tal cantidad de ekogudaris, neohippies y antivacuna que recién hace un mes se ha empezado a abrir el melón de considerar la instalación de parques eólicos en Euskadi

Y luego están los nimbys vascos. Esos que te montan una comisión antiloquesea en el pueblo a las primeras de cambio. Los que cuelgan del balcón la bandera de 'Ongi etorri Errefuxiatuak' mientras la basura tóxica y peligrosa de su país emigra, legalmente, hacia un vertedero del cual Euskadi carece ¿por qué será? O ilegalmente, hacia el país de origen de esos errefuxiatuak. 

¿Hay algo más ecologista y de izquierdas que apoyar la energía renovable a la que debemos encaminar nuestro futuro verde? La eólica y la solar, por ejemplo. Pues sepan ustedes que Bildu tiene alojado en su cuerpo de votantes y simpatizantes a tal cantidad de ekogudaris, neohippies, antivacunas y ruralistas que recién hace un mes se ha empezado a abrir, con gran contestación interna, el melón de considerar la instalación de parques de generación eléctrica eólica en Euskadi. Y ya veremos hasta donde es capaz de llegar. 

Tercero. Ongi etorri Errefuxiatuak. O no. Porque un errefuxiatu se convierte en emigrante enseguida. Y ese emigrante se suma a otros emigrantes y así, poco a poco, te encuentras que “hoy día uno de cada tres nacimientos en Navarra ya es de madre emigrante. Mañana serán mayoría. Una bomba retardada”, tal y como escribía hace quince días en los diarios del Grupo Noticias el antaño intelectual orgánico abertzale Jose Mari Esparza Zabalegi. 

En su artículo, titulado '¿Migración? No gracias' Esparza dice cosas como "…la migración masiva es una lacra que hipoteca a los pueblos que vacía; que lastra y desarticula a los pueblos que la reciben, sobre todo a los que, como el vasco, no tienen libertad para decidir sus políticas migratorias; que esclaviza a los parias que abandonan sus hogares; que desarma a los trabajadores locales y hace peligrar sus conquistas sociales".

Un errefuxiatu se convierte en emigrante enseguida

El artículo ha levantado ampollas en el mundo Bildu. Ha habido mucho detractor, algún defensor y determinadas voces muy señaladas que piden que no se demonice al autor que, al fin y al cabo, solo pretende abrir un debate. Esas voces y ese debate me preocupan mucho. A mí. Personalmente. Llámame loco pero no me parece un debate muy de izquierdas.

Y así, mutatis mutandi, Bildu se nos aleja de las banderas rojas.