Ramón de Campoamor dejó para la historia allá por mediados del siglo XIX uno de los mejores resúmenes aplicables a las noches electorales actuales en su poema, Las dos linternas: “y es que en este mundo traidor nada hay verdad ni mentira: todo es según el color del cristal con que se mira” y a juzgar por lo escuchado, todos menos uno, están en la horquilla de satisfechos a muy muy satisfechos.

No ha habido sorpasso de EH Bildu, ni ha conseguido ser primera fuerza en votos. El PNV con alegría desbordada en Sabin Etxea ha logrado ser la primera fuerza en Euskadi con 27 escaños, empatado con los abertzales y casi más de 30.000 votos en su haber. A Imanol Pradales se le ha cumplido el deseo de acariciar la Lehendakaritza al soplar las velas en el día de su cumpleaños en la noche menos apta para cardíacos de las últimas citas con las urnas.

Pueden resoplar con alegría los jeltzales al retener por votos ser la primera fuerza. Ese sapo hubiera sido difícil de digerir y, sin embargo, los de Pradales están legitimados para empezar a llamar al resto de partidos para conformar un Gobierno que apunta a una tranquila mayoría absoluta con el PSE

Pueden resoplar con alegría los jeltzales al retener por votos ser la primera fuerza. Ese sapo hubiera sido difícil de digerir y, sin embargo, los de Pradales están legitimados para empezar a llamar al resto de partidos para conformar un Gobierno que apunta a una tranquila mayoría absoluta con el PSE. Ambas fuerzas suman 39 escaños y la suficiencia de los números bloquea al resto de fuerzas en sus aspiraciones de ser determinantes para la gobernabilidad. Trabajo realizado, misión cumplida parecía transmitir Andoni Ortuzar, presidente del EBB, dejando en el apartado de pendientes lo que queda por hacer, cuatro años por delante para reflexionar lo que supone la bajada de cuatro escaños y quedar empatado con tu competidor.

EH Bildu pletórico tras obtener los mejores resultados, 27 escaños, y mirarle a la cara al PNV, en sus primeras declaraciones al grito de independentzia hace un viraje del mensaje de campaña centrado en las políticas sociales. Su evolución a más ha sido exponencial cita tras cita electoral, pero no ha llegado a las expectativas que barajaban y que las encuestas les auguraban. ¿Qué le ha faltado para no haber terminado de cumplir con lo que vislumbraba?

Quizá no le ha faltado nada y sí le ha sobrado la última semana de campaña. Su capacidad de influencia se ve mermada ante la mayoría absoluta si hay reedición de Gobierno de coalición, y puede quedarse un tanto desangelado al no encontrar alianzas con facilidad con el nuevo mapa político. Será interesante observar cómo maneja los dos discursos a la vez, seguir siendo alternativa y poner en práctica ese otro modelo de gobernanza basado en la cooperación al que ha apelado Otxandiano una y otra vez.

El PSE con dos representantes más suma 12 parlamentarios. Eran las mejores proyecciones que les daban en las encuestas y henchido de gozo Eneko Andueza sabe que son unos resultados extraordinarios, sobre todo para poner sobre la mesa el aumento de peso de su formación a la hora de negociar con el Pnv. Es el as en la manga que utilizará para ganar peso en el Gobierno. Resulta que ser el socio menor de la coalición es mucho más confortable que helarse en la oposición como algunos socialistas sotovoce dejaban caer.

Junto con lo ocurrido en Galicia o Andalucía nos viene a decir que la izquierda a la izquierda del PSOE está muy débil y eso no son buenas noticias para Pedro Sánchez que necesita que ese espacio aguante lo suficiente de cara a una Legislatura en el aire tras lo que suceda en la cita electoral de Cataluña el 12 de mayo

El Partido Popular aparentemente está satisfecho, ha conseguido 30.000 papeletas más que en la última ocasión donde tocó suelo y 7 representantes (+1).  Sin embargo, no será determinante y en clave estatal su objetivo de fagocitar a Vox no lo ha cumplido. Vox no solo ha revalidado su escaño por Álava, sino que ha aumentado el número de votos recibidos.

La debacle de la izquierda confederal era de esperar. Malísimos resultados para Elkarrekin Podemos que desaparece del Parlamento vasco, a pesar de que estaban avisados de que dividirse en dos marcas era no poder. Sumar llevará a su representante por Álava que ni siquiera es la cabeza de lista Alba García. Junto con lo ocurrido en Galicia o Andalucía nos viene a decir que la izquierda a la izquierda del PSOE está muy débil y eso no son buenas noticias para Pedro Sánchez que necesita que ese espacio aguante lo suficiente de cara a una Legislatura en el aire tras lo que suceda en la cita electoral de Cataluña el 12 de mayo.