Los grupos políticos acercan posturas en torno a la futura nueva Ley de Educación Vasca. Los grupos del PNV, PSE, EH Bildu y Elkarrekin Podemos han pactado la creación de un nueva ponencia parlamentaria donde se debatirá y acordarán las grandes líneas de la normativa que definirá el rumbo educativo. La iniciativa ha contado con la abstención del grupo PP y Ciudadanos; mientras que Vox, por su parte, no ha participado en el debate. Este grupo de debate definirá las bases que permitan alcanzar un "amplio acuerdo" que se verá plasmado en la nueva ley en la que el trabaja el Gobierno de Iñigo Urkullu con el objetivo de llevarla a la Cámara autonómica el próximo año.

A la ponencia acudirán expertos, agentes sociales y representantes institucionales para hacer aportaciones y sus conclusiones se remitirán al Departamento de Educación para que constituyan las bases de la nueva ley que será aprobada por el Gobierno vasco el próximo año, tal y como se comprometió el lehendakari en el pleno de Política General del pasado mes de septiembre.

Aunque serán muchas las cuestiones que los partidos políticos deberán pactar para que la nueva Ley de Educación salga adelante con un consenso suficiente, el euskera y cómo articular su enseñanza en la escuela centrará buena parte de los debates que se acelerarán a partir de ahora. El último informe del Instituto Vasco de Evaluación e Investigación (IVEI) ratifica que el modelo D no consigue formar alumnos bilingües en euskera y castellano y aumenta de forma alarmante el número de alumnos que no son competentes en ninguno de los dos idiomas oficiales. 

Una realidad que reabre el debate sobre el papel que debe tener la escuela en la euskaldunización y si debe primar la lengua sobre las competencias que tienen que adquirir los alumnos en las distintas materias.

Desde los grupos proponentes, la parlamentaria del PNV Leixuri Arrizabalaga ha defendido que los partidos deben ser capaces de definir un nuevo marco que sirva de guía para la educación de los próximos treinta años con la actualización de una normativa que data de 1993. "Es importante abrir un nuevo tiempo en el proceso de construcción del futuro sistema educativo. Un sistema que nazca fruto del consenso y perdure en el tiempo", ha apuntado.

Por su parte, Ikoitz Arrese (EH Bildu) ha considerado clave la formación de esta ponencia porque abre la posibilidad a alcanzar "consensos firmes y amplios" y ha defendido su propuesta para caminar hacia "un sistema educativo público soberano". "La izquierda independentista está preparada para abordar el reto y en EH Bildu no vamos a dejar pasar esta oportunidad porque este es el compromiso que tenemos con este país", ha subrayado.

La moción consecuencia de interpelación del PP+Cs, que ha sido rechazada, planteaba que la nueva ley garantice de manera efectiva y real en la red pública la libertad de elección del idioma en el que estudien los niños y que refuerce la red concertada, entre otras medidas.