La vista prevista para mañana contra el que fuera alcalde de Alonsotegi (Bizkaia) entre 2011 y 2015, José Luis Erezuma, del PNV, por un supuesto fraude en el cobro de subvenciones ha quedado suspendida a petición de las partes, según han informado fuentes judiciales. El martes 18 iba a celebrarse el primero de los tres juicios contra el exedil, tres asesores municipales y dos responsables de una constructora, por un supuesto fraude en el cobro de subvenciones por casi 700.000 euros para unas obras que no se realizaron.
Según informa Efe, a petición de las partes, ha quedado suspendida la vista contra los seis acusados, para los que la acción popular ejercida por el grupo municipal de EH Bildu pide una pena de hasta 8 años de cárcel, mientras que la Fiscalía solicita para ellos una condena de seis años por los supuestos delitos de malversación, fraude, prevaricación y falsedad en documento oficial.
La investigación judicial de este caso se inició en 2018 por el juzgado de instrucción número 4 de Barakaldo para esclarecer un episodio de obras falsas ocurrido en noviembre de 2011 tras unas riadas en el municipio de Alonsotegi. Se trata de tres proyectos (dos muros y un sótano) por los que la Diputación vizcaína concedió una ayuda extraordinaria de 600.000 euros. Sin embargo, la Fiscalía señala que no hubo desperfectos en las tres instalaciones y las diligencias han determinado que ese dinero se utilizó para pagar a la constructora Laneder, (en disolución tras quebrar en 2013), con la que el Ayuntamiento tenía una deuda de más de un millón de euros por una obra anteriormente realizada en 2008.
Este abono por obras no ejecutadas fue reconocido, en su declaración ante el juez en noviembre de 2018, por uno de los constructores, Eduardo Ibarra. “El alcalde nos dijo que nos iba a pagar la deuda que tenía con Laneder pero que había que hacer firmar una serie de papeles y hacer una serie de facturas [falsas]. Y si no [aceptábamos] nos dijo textualmente: a la cola y ya veremos cuando cobráis y si cobráis. Como ya llevábamos cuatro años que no nos pagaban, al final optamos por firmar y cobrar”. Admitió que no ejecutaron ninguna de las tres obras por las que facturaron los 600.000 euros. “No se hicieron los trabajos que se dicen” en las facturas emitidas, declaró. El constructor reveló que en menos de un mes ya recibieron el dinero. Según la documentación municipal, la “obra” se ejecutó en apenas 10 días, ya que fue contratada el 9 de marzo de 2012, la constructora presentó la documentación el 20 de marzo y las certificaciones el 16 de abril. Un plazo imposible para tres proyectos por 600.000 euros.
El exalcalde José Luis Erezuma, en su declaración ante la jueza el 17 de julio de 2019, admitió que las obras, pese a haber sido pagadas, no se ejecutaron pero que esta operación no supuso perjuicios económicos para el Ayuntamiento de Alonsotegi.