Como ya se dejó por escrito en el pacto de firmado por el PNV y el PSE tras las elecciones del pasado 28 de mayo, socialistas y nacionalistas iban a gobernar en coalición en todas aquellas instituciones donde fuera necesario unir fuerzas. Un acuerdo que se oficializó durante los plenos de investidura celebrados este sábado, en municipios como Vitoria, donde este martes ambas formaciones han cerrado su acuerdo para establecer un Ejecutivo de coalción con la nueva alcaldesa, Maider Etxebarria a la cabeza.
El pacto, del que queda fuera el Partido Popular pese a que también votó en favor de la candidatura de Etxebarria, deja en la capital alavesa un Gobierno conformado únicamente por 12 ediles de los 27 que conforman el Consistorio -uno menos de los que juntaban las dos fuerzas durante el pasado mandato de Gorka Urtaran-, por lo que PSE y PNV tendrán que apoyarse en, al menos, una de las tres fuerzas políticas restantes. Ya lo hicieron en los populares para la investidura, y también con Elkarrekin Podemos durante su anterior Gobierno.
Aunque todavía se conocen pocos detalles sobre el acuerdo y sobre qué carteras irán a parar a cada partido, lo que sí se ha dejado en claro es que la exconsejera de Igualdad, Justica y Servicios Sociales, y candidata del PNV en los pasados comicios, Beatriz Artolazabal, será nombrada teniente de alcaldesa, un puesto que durante la legislatura de Urtaran ocupaba la nueva alcaldesa.
En los próximos días ambas formaciones irán desgranando las líneas fundamentales del nuevo gobierno municipal y las responsabilidades de cada fuerza, entre las que destacan las carteras de Hacienda, Movilidad y Urbanismo. La primera de estás será gestionada por los socialistas, mientras que los de Artolazabal mantendrán Urbanismo, Seguridad, Políticas Sociales y Promoción Económica.
Reparto de responsabilidades
Según han dado a conocer Etxebarría y Artolazabal junto a la secretaria general del PSE de Álava, Cristina González y el presidente de la Ejecutiva Alavesa del PNV, José Antonio Suso, el nuevo Ejecutivo ha dividido las competencias cuatro áreas donde ambas formaciones tienen el mismo peso, y el reparto de las concejalías deja al PSE con seis, y al PNV con otras síes.
Los socialistas dirigirán -además de las recién mencionadas Alcaldía y Hacienda-, las áreas de Relaciones Institucionales e Igualdad; Recursos Humanos; el antiguo departamento de Urbanismo, ahora conformado por Vivienda, Limpieza y Medio Ambiente, renombrado como Modelo de Ciudad; Promoción Económica, Empleo, Comercio y Turismo; y Deporte, Salud y Cooperación al Desarrollo.
El resto de concejalías: Cultura y Educación: Transformación Digital, ahora llamado Modernización de la Administración; Seguridad; Espacio Público y Tráfico (equivalente al antiguo área de Movilidad); Gobierno Abierto y Políticas Sociales; irán para la formación jeltzale.
Además, respecto a la gestión de sociedades municipales, el PSE se encargará de Amvisa, Ensanche 21, Centro de Estudios Ambientales y Gilsa, mientras que el PNV gestionará la Escuela de Música Luis Aramburu, así como el Conservatorio de Danza José Uruñuela y Tulvisa.
Sin embargo, pese a conocerse ya el reparto de responsabilidades, todavía no se ha confirmado quienes dirigirán cada una de estas concejalías, algo que se irá desvelando en los próximos días.