Este jueves se celebraba en RTVE el debate electoral entre los portavoces de los siete partidos mayoritarios en las próximas elecciones. Debate, en el que han participado: Patxi López (PSOE), Cuca Gamarra (PP), Iván Espinosa de los Monteros (VOX), Aina Vidal (Sumar), Gabriel Rufián (ERC), Aitor Esteban (PNV) y Oskar Matute (EH Bildu); y que ha tenido como temas protagonistas temas como la vivienda, los pactos postelectorales o el empleo.
Han sido numerosos los momentos que han tenido a los representantes vascos como protagonistas. Aitor Esteban, representante del PNV, en sus primeros minutos de intervención ha resaltado y enfatizado en el “sentimiento nacionalista vasco”, rehusando la política del PP: "El Estado se enfrenta a dos patatas calientes, a la patata catalana y a la euskal patata. Hay un sentimiento nacionalista que hay que resolver políticamente y no con el Código Penal, porque la receta del PP es todos a la cárcel”.
Y haciendo referencia a su pacto con el PSOE, ha admitido: “Firmó con nosotros buscar vías para resolver estos problemas. Nuestra propuesta es el reconocimiento nacional y aceptar que la política doméstica es europea y esta puede dar canal a este sentimiento".
En esta línea, Esteban ha incidido en su minuto final que las próximas elecciones, “no son unas elecciones presidenciales” y que el PNV “siempre tiene los intereses de Euskadi por delante, porque nosotros no somos las muletas de nadie. Vamos a defender tu bienestar, el autogobierno, con convicción, pero frente a toda involución democrática. En Euskadi hay una alternativa: vota PNV".
“¿Dónde estaba usted?”
Uno de los momentos más tensos del debate a siete ha sido cuando Espinosa de los Monteros, representante de Vox ha hecho alusión al asesinato de Miguel Ángel Blanco, ocurrido hace 26 años en Ermua: "26 años más tarde, nadie podía imaginar que estaríamos aquí debatiendo con los herederos de ETA. No sé si este señor estuvo imputado o no, pero sé que esclarecer los 300 asesinatos pendientes está a tiro de su teléfono móvil”, ha dicho señalando a Matute; y ha continuado: “Yo no sé dónde estaba usted en ese momento."
A lo que Oskar Matute, representante de EH Bildu, ha contestado:"Yo me encontraba en una vigilia en Ermua pidiendo la liberación de Miguel Ángel Blanco, no sé dónde estaba usted. Sus discursos de odio van en contra de la voluntad que ha manifestado Euskal Herria”.
Matute ha hecho alusión asimismo al sentimiento nacionalista de su partido, remarcando que nunca pactaría con la derecha: "Bildu decidió no ser equidistante. Un gobierno de la ultraderecha amenaza lo que es Euskal Herria y lo decimos sin ambigüedades: nunca apoyaremos a la derecha en ningún espacio”. Idea que ha abogado por defender en su minuto de oro: "la gente de la izquierda soberanista decimos que la historia se puede escribir de otra manera. Votar EH Bildu tiene pleno sentido para construir nuestra propia historia".