"La reparación material y simbólica" de las 180.000 personas que tuvieron que abandonar Euskadi por el terrorismo de ETA, ha sido la propuesta de PP, Vox y Cs en el Parlamento Vasco hecha a el Gobierno vasco. Los tres grupos políticos han socilicitado partidas presupuestarias para "propiciar el retorno voluntario" de víctimas de ETA.
Ha sido Vox el que este jueves ha llevado al pleno de la Cámara una moción sobre las personas obligadas a huir del País Vasco debido a la amenaza del terrorismo de ETA, con la que además proponía, entre otros asuntos, que el Gobierno central y vasco realizaran un estudio para identificar a las personas que huyeron para conocer su situación y si desean volver a residir en Euskadi o "recuperar los lazos afectivos perdidos".
También pedía al Gobierno vasco que habilitara partidas presupuestarias para apoyar el cambio de residencia, un programa de ayudas para la "reparación material y simbólica" y "propiciar el retorno voluntario" de estas víctimas, así como la puesta en marcha de campañas de sensibilización social para "arropar y acompañar a las víctimas de ETA que deseen regresar al País Vasco, para fomentar su reconocimiento por parte de la sociedad".
Sin embargo, el texto no ha salido adelante, ya que sólo ha contado con el voto positivo de PP y Cs, mientras que el resto de grupos --PNV, EH Bildu, PSE y Elkarrekin Podemos-IU-- han votado en contra de la iniciativa de Vox. La parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, ha explicado que "según un estudio reciente realizado por la Fundación Universitaria San Pablo-CEU, serían alrededor de 180.000 las personas que se vieron obligadas a huir por la amenaza terrorista y la presión política de su entorno".
"Son cifras que no deberían permitirse en una sociedad como la vasca porque representan, en el peor de los casos, casi el 10% de la población vasca. Se trata de un auténtico éxodo, la realidad de miles de personas, tantas que de estar aquí, condicionarían además de forma muy notable el actual mapa político, la representación de cada partido en este Parlamento", ha destacado.
Facilitar el retorno
En el debate sólo han participado los parlamentarios de PP y Cs. El parlamentario del PP, Carmelo Barrio, ha defendido que "la sociedad tiene una deuda con esas personas amenazadas, perseguidas, heridas, secuestradas, extorsionadas que sufrieron la violencia política y social que practicaba ETA y que decidieron buscar refugio en otras partes de Europa" y cree que "a los que quieran volver, hay que facilitarles las condiciones para ello".
Barrio ha pedido que Udaberri, el plan del Gobierno vasco para la convivencia, los derechos humanos y la diversidad, cuente con una estrategia para que "todas esas personas que fueron expulsadas a un exilio lamentable, que son víctimas" sean "reconocidas y ayudadas". "La sociedad tiene una deuda con todas ellas, debe de facilitarse la vuelta a quien lo pida", ha insistido.
El parlamentario de Cs Jose Manuel Gil cree que es "de Justicia, de Democracia y de coherencia", reparar los efectos del terrorismo de ETA y ha destacado el caso de "las personas que se vieron obligadas a irse del País Vasco por las amenazas a ellos y a sus familias", ya que "se fueron pero siguen existiendo, siguen sufriendo y siguen soportando los efectos de aquella barbarie". "Tenemos un Día de la Diáspora y derecho a voto reconocido por el Estatuto para los vascos en el exterior, mientras una décima parte de nuestra población se fue a otras zonas de España con gran dolor y sufrimiento y el Gobierno mira para otro lado", ha criticado antes de afirmar que el País Vasco tiene un censo electoral "trucado".