Unas 20.000 personas, según fuentes municipales, se han manifestado este sábado en Bilbao, convocadas por la red ciudadana Sare, para reclamar que instituciones políticas y judiciales vascas "diseñen y faciliten" el regreso a casa de los presos de ETA. La tradicional manifestación anual, también organizada por la asociación de familiares de presos de ETA, Etxerat, se ha desarrollado en un ambiente festivo bajo el lema 'Konponbiderako giltzak - Llaves para la resolución'.
Entre gritos a favor de la vuelta de los presos "a casa", la marcha ha partido pasadas las 16.00 horas desde el pabellón de La Casilla de la capital vizcaína y ha discurrido por las calles Autonomía, Zabalburu, Hurtado de Amezaga, Plaza Circular y Buenos Aires. Ha concluido en el Ayuntamiento de Bilbao, donde Joseba Azkarraga y Anaiz Funosas han leído un manifiesto, en euskera y castellano, dirigido a la ciudadanía.
Las reclamaciones expuestas este sábado en Bilbao se refieren a los 160 etarras que están en las cárceles del País Vasco y Navarra. Se trata de los reclusos terroristas que arrastran condenas más largas, en su mayoría por haber perpetrado delitos de sangre.
En la marcha ha tenido un gran protagonismo, como siempre ocurre, EH Bildu. Aunque, como adelantaba este diario, su recién estrenado candidato a lehendakari, Pello Otxandiano, no ha sido protagonista.
Además, han respaldado y/o acudido a la marcha Elkarrekin Podemos, Junts, ERC, CUP y BNG, así como las entidades independentistas catalanas ANC y Ómnium y los sindicatos nacionalistas de Euskadi.
"Cerrar el ciclo de las violencias"
"A los presos les decimos que seguiremos trabajando para sacarlos a la calle. No los hemos traído hasta aquí para que continúen en la cárcel. Los hemos traído a las cárceles vascas para que vayan saliendo una vez les sea aplicada una legislación de carácter ordinario. Queremos ser la llave de la solución y esa llave la tienen que tener las instituciones vascas y la judicatura vasca", ha subrayado el portavoz de Sare, Joseba Azkarraga, que ha censurado además a quienes utilizan "las togas con afán de venganza y a la Audiencia Nacional como plataforma de prevaricación".
Entre los manifestantes, se han entremezclado representantes políticos, de organizaciones sindicales y sociales, que han reivindicado los derechos de los presos de ETA y han exigido "el fin de la excepcionalidad". Tras mostrar su esperanza de "poner fin a todas las normas penitenciarias de excepción" que afectan a los presos, Sare ha agradecido en el comunicado final la participación de "partidos políticos, sindicatos y asociaciones de Euskal Herria", especialmente de la ciudadanía vasca, por su presencia en la marcha "diciendo alto y claro, que mientras las personas presas no vean reconocidos sus derechos, seguiremos viviendo una injusticia y teniendo un problema irresuelto".
En opinión de Sare, con ese "esfuerzo colectivo" se está "abriendo el camino de regreso a casa" de los presos de ETA, "personas exiliadas y deportadas vascas". La red ciudadana ha afirmado que buscan "cerrar el ciclo de las violencias, con una pacificación real, que dé paso a la convivencia y la resolución", mediante la implantación de "una cultura de los derechos humanos y de paz". "Eso sería una auténtica garantía de no repetición", ha indicado.
En este punto, se ha dirigido a "quienes se empeñan en dibujar un escenario de vencedores y vencidos", para advertirles de que "ese escenario es imaginario" y, además, "ajeno a las ansias de paz que tiene la inmensa mayoría de la sociedad vasca".
Según ha recordado, el "esfuerzo" de organizaciones políticas, sindicales y sociales como Sare, para "poner fin a la cruel política de alejamiento" ha conseguido que los presos de ETA "estén ya en las cárceles" de la Comunidad Autónoma Vasca y Navarra, lo que supone "una etapa cumplida".
Llamamiento a las instituciones vascas
Sin embargo, ha advertido de que "ahora toca abrir las puertas de las cárceles y traerlos a sus casas, a través de la aplicación de una política penitenciaria sin excepciones". "Cojamos en nuestras manos las llaves de la resolución. Las llaves que cierren las puertas al sufrimiento. Las llaves que abran las puertas a la convivencia. Y todo ello con más democracia", ha indicado.
Para Sare, la "vuelta a sus casas de estas personas" debe ser realizada por "las instituciones políticas y judiciales de Euskal Herria". "Debe ser la sociedad vasca, a donde estas personas han de regresar, quien defina el cómo y el cuándo deben regresar. Y ello exige decisiones politicas, valientes y justas", ha puntualizado.
Por ello, ha exigido "una política judicial y penitenciaria, sin normas excepcionales". "No exigimos privilegios. Exigimos que se les aplique la legalidad ordinaria y se respeten los derechos que asisten a las personas privadas de libertad", ha indicado.
Esta marcha, como siempre, ha despertado las críticas de las asociaciones de víctimas del terrorismo, que señalan cómo en este tipo de marchas se trata de forma acrítica a los miembros de ETA, como si fueran "presos políticos". Algo que ya expuso este diario en la previa de la protesta.