A las puertas ya de la campaña electoral EH Bildu ha presentado sus propuestas en materia económica e industrial como parte central del programa de cara a la cita con las urnas el próximo día 21. El candidato a lehendakari, Pello Otxandiano, ha dicho que la situación de la economía vasca "no es catastrófica" pero sí puede entrar en "fase de declive a medio plazo", en unos cinco años, si no se toman medidas.
Repartidas en cuatro bloques, las medidas que presenta la coalición soberanista giran en torno a la política industrial, la energía, el mercado laboral y la tecnología. En el primer caso se detallan propuestas para pequeñas empresas y también para las más grandes, en especial para retener el arraigo de aquellas compañías estratégicas para que no sigan el camino de Euskaltel, Ibermática o Gamesa. "No se ha hecho nada para mantener esas empresas", ha dicho Otxandiano.
En concreto, la formación plantea reclutar músculo inversor en mayor volumen que el que tiene en estos momentos Finkatuz (que solo ha invertido en CAF, Kaiku e ITP Aero) diseñando un nuevo fondo soberano que articule este dinero. Según ha explicado Otxandiano, aunque aun es necesario hacer un análisis más técnico, en una primera valoración su formación estima que se podría disponer de alrededor de 1.300 millones de euros si se suman las aportaciones de los instrumentos con dotación presupuestaria ya existentes, como el propio Finkatuz, las Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV) y el apoyo de las fundaciones bancarias de Kutxabank (Vital, Kutxa y BBK).
El 5% de las EPSV
En ese sentido la coalición hace referencia al dinero con que cuentan los planes de pensiones vascos como potencial financiero para retener centros de decisión, en la línea del posicionamiento de analistas económicos de referencia como Guillermo Dorronsoro. Según EH Bildu podría utilizarse para este fin en torno al 5% de los en torno a 28.000 millones con que cuentan las grandes EPSV.
En cuanto a Kutxabank, Otxandiano ha señalado que "falta visión de país" en la gestión del banco y ha hecho referencia a las desinversiones en el accionariado de grandes empresas en los últimos años. Según se indica, la formación plantea que las instituciones estudien "todas las vías que permitan recuperar el control del que podría ser un instrumento financiero de gran potencial". Las fundaciones (BBK, Vital y Kutxa) "no garantizan en absoluto un control democrático" del banco, indica EH Bildu.