El candidato de EH Bildu a las elecciones en el País Vasco, Pello Otxandiano, y el Coordinador General del partido, Arnaldo Otegi, celebran los resultados / Miguel Toña - EFE
Euforia en Bildu aunque Otxandiano y Otegi se quedan con la miel en los labios
La coalición abertzale no consigue el sorpasso pero alcanza un empate histórico a escaños que confirma su ascenso como fuerza política capaz de tutear en las urnas al PNV
22 abril, 2024 00:07"¡Hostia 29!". Los simpatizantes de EH Bildu congregados en el bilbaíno mercado del Ensanche celebraban el primer resultado provisional avanzado pasadas las nueve de la noche por Josu Erkoreka. Las encuestas invitaban al optimismo y ese primer recuento tras el cierre de urnas llevaba a la coalición abertzale a soñar con la que hubiera sido una victoria histórica.
Finalmente los de Pello Otxandiano se quedan en 27 representantes en el Parlamento vasco, los mismos que el PNV pero por detrás en número de votos. La coalición abertzale puede celebrar un gran resultado en estos comicios aunque, teniendo en cuenta que la formación que encabeza Arnaldo Otegi ha tocado la victoria con los dedos, finalmente el recuento deja una sensación de victoria incompleta.
No habrá sorpasso finalmente y, pese a que las encuestas consideraban favorita a la candidatura de Otxandiano, EH Bildu deberá conformarse con un meritorio empate a escaños con la que ha sido la fuerza política hegemónica en Euskadi en los últimos años, que en el sprint final ha sido un rival imposible de batir.
Condicionada esa recta final de la campaña por negarse el candidato de Otxandio a calificar de terrorista a ETA, por lo que el cabeza de lista de Bildu acabó pidiendo perdón a las víctimas de la banda, la sensación es que el PNV ha sabido tirar de golpe de riñón a un palmo de la línea de meta para movilizar a su electorado y dejar con la miel en los labios a la formación de la izquierda abertzale, que sí gana en Gipuzkoa y Álava.
El cambio "imparable"
Ante unos cientos de simpatizantes y con los principales dirigentes de la formación, Otxandiano se ha referido precisamente a esas expectativas que, pese a todo, abre este resultado. "El cambio es imparable", ha dicho el candidato de Bildu tras conocerse que su formación ha roto su techo de apoyos con casi 350.000 votos en este 21-A.
Más allá de lecturas partidistas en caliente, lo cierto es que el PNV ha logrado evitar la debacle y cerrar en positivo el ciclo de Iñigo Urkullu en Ajuria Enea, pero ni mucho menos tiene asegurado el dominio político a medio plazo. Aunque con toda probabilidad se reeditará el Gobierno PNV-PSE, pese a no lograr más votos el ascenso de EH Bildu es una clara advertencia para próximas citas con las urnas.
