Adiós a una generación política: "Muy orgulloso de nuestra Euskadi"

Este martes tomarán posesión de su cargo los quince consejeros y consejeras elegidos por Imanol Pradales para conformar el nuevo Gobierno vasco. Muchas caras nuevas, casi todas (con las excepciones de Bingen Zupiria, Nerea Melgosa y Javier Hurtado, además del regreso de María Jesús San José), lo que supone decir adiós a un buen número de mandatarios institucionales, hasta ocho, que en algunos casos podrían incluso poner fin así a su ciclo político.

Dejan el gobierno históricos jeltzales como Josu Erkoreka o Pedro Azpiazu, que compartieron por ejemplo una larga andadura en el Congreso de los Diputados en Madrid antes de ser 'fichados' por Iñigo Urkullu, en ambos casos para ocupar cargos de mucho peso en Lakua. También fue diputada en Madrid, aunque bastante menos tiempo, Arantxa Tapia, en un breve paso por la capital entre su etapa en la Diputación de Gipuzkoa y su salto a la primera plana política al asumir la cartera de Industria del Ejecutivo de Urkullu en 2012.

En las filas socialistas se despide del Gobierno de Gasteiz Iñaki Arriola, consejero vasco ya en la etapa de Patxi López, mientras que Idoia Mendia da el salto a Europa y Javier Hurtado sí continúa como responsable de Turismo.

Este lunes, en la víspera del nombramiento de su nuevo equipo, Pradales quiso enviar un mensaje de agradecimiento a todos los cargos salientes por su trabajo estos años en los que, según remarcó, han contribuido a situar a Euskadi "entre los países más avanzados de todo el mundo".

Josu Erkoreka, Gotzone Sagardui y Jokin Bildarratz en Gernika: los tres abandonan el Gobierno vasco. Irekia

Diplomacia

Un mensaje protocolario que, en este caso, encierra grandes dosis de diplomacia habida cuenta de lo delicado que fue en clave interna en su día el 'traspaso de poderes' de Urkullu a Pradales a pesar del vínculo personal que hay entre ambos. La intención del PNV de enviar un mensaje de renovación queda confirmada en esta casi 'revolución' en la configuración del nuevo ejecutivo, en el que entran además perfiles muy técnicos y no tanto con carrera política a sus espaldas.