Este viernes quedará inmortalizada una imagen histórica. Porque es la tercera vez que un presidente del Gobierno central rinde visita al Palacio de Ajuria Enea para visitar al lehendakari. Nadie esperaba ver a Pedro Sánchez e Imanol Pradales juntos en la sede simbólica del Gobierno vasco. Y eso es justo lo que se verá este viernes.
El encuentro, tal y como ha informado Crónica Vasca, llega en un momento clave de las negociaciones entre los dos gobiernos, el nacional y el autonómico, destinadas a culminar el traspaso de todas las competencias recogidas en el Estatuto de Gernika. Terminar las transferencias es un compromiso de PNV y PSOE que sirvió para investir a Sánchez y también está en el acuerdo de gobierno de Euskadi entre jeltzales y socialistas.
La concesión de más competencias para la Ertzaintza en puertos y aeropuertos, anunciada esta semana, es un paso más en esta dirección. Y la próxima semana habrá una cumbre entre la consejera de Autogobierno del Gobierno vasco, María Ubarretxena,y el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, con el objetivo de poner en marcha la Comisión Bilateral Permanente que tiene que encauzar y cerrar estas negociaciones.
El momento
A ello hay que sumar dos datos relevantes que guardan relación con el simbolismo y el momento elegido para este encuentro. Uno es que Sánchez hace este viaje inesperado en un momento difícil, cuando más necesita afinar las relaciones con sus socios. Y el PNV es un socio de referencia para el Gobierno de coalición progresista.
El otro dato, que tampoco es baladí, es que el encuentro supone un cambio clarísimo en las relaciones entre ambos ejecutivos, tras unos años, los últimos del anterior lehendakari, Iñigo Urkullu, donde no parecía haber demasiada sintonía entre Moncloa y Ajuria Enea. Ahora, las cosas han cambiado. O eso quieren hacer ver ambas partes.
Tercera visita así
Tal y como informa Europa Press, la imagen de Pradales recibiendo a Sánchez en la entrada de Ajuria Enea pasará a la historia, ya que solo en dos ocasiones anteriores un presidente del Gobierno de España se ha desplazado hasta el palacio presidencial de la capital alavesa para reunirse con un lehendakari.
Acudieron en su día Adolfo Suárez en la época de Carlos Garaikoetxea y José Luis Rodríguez Zapatero cuando gobernó Patxi López. No es la primera vez, sin embargo, que Pedro Sánchez pisa Ajuria Enea, ya que Iñigo Urkullu le recibió en julio de 2015, pero en su calidad de secretario general del PSOE ya que no había accedido todavía a la Moncloa. Fue antes de que PNV y PSE-EE, con Urkullu como Lehendakari, gobernaran en coalición en Euskadi.
En esta ocasión, Sánchez, como presidente del Gobierno del Estado, con los jeltzales como socios preferentes en Madrid y con un recién reeditado Gobierno vasco entre el PNV y los socialistas, ha respondido al emplazamiento de Pradales para mantener una reunión con una visita 'in situ', sin citarle en La Moncloa, como suele ser habitual.