Después del fracaso de la OPA del BBVA sobre Sabadell, puesto que no ha alcanzado ni el 30% de los derechos de voto, el Gobierno vasco se ha pronunciado este viernes acerca de la operación.
Además de destacar que se trata de una operación "entre dos empresas privadas", el Ejecutivo ha recordado que "eran los accionistas quienes debían decidir". "Y han decidido", han asegurado en un comunicado fuentes de Lehendakaritza.
"Tener un sector financiero fuerte, competitivo y con arraigo es bueno y necesario. Para la economía vasca y para la catalana", ha afirmado el Gobierno vasco.
En el comunicado, han recordado que BBVA es un banco vasco "con raíces profundas en Bilbao y una larga trayectoria de compromiso con Euskadi". "En los últimos tiempos ha dado pasos importantes para reforzar su presencia, su contribución y su impacto económico y financiero en nuestro País".
Y, para el Gobierno vasco, "ese es el camino que hay que seguir". "Hay que seguir profundizando en esa dirección, consolidando la relación y generando un mayor retorno compartido, tanto para Euskadi como para el propio banco", han señalado desde Lehendakaritza.
Para concluir, han considerado que "se abre un nuevo tiempo para BBVA", así como "una nueva etapa para afianzar y reforzar la relación de Euskadi con una de sus principales entidades financieras".