El debate educativo vuelve estar de actualidad a la espera de la definitiva nueva Ley de Educación y, mientras tanto, la escuela vasca sigue lejos de tener un perfil claro sobre el relato y las temáticas que se enseñan en sus aulas. Y lo vemos con el caso muy concreto de un instituto de Vitoria. Hace unas semanas, 'Crónica Vasca' adelantaba que los centros públicos no se estaban acercando a visitar el Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo y que incluso algunos habían cancelado sus visitas. Es el caso del Instituto Ekialde, que se encuentra a apenas a unos metros del lugar donde ETA asesinó a Fernando Buesa y su escolta el 22 de febrero del año 2000.
El paso atrás de este instituto, en su área de bachiller, fue el resultado de un boicot preparado por la organización estudiantil de la izquierda abertzale, Ikaslerian Martxan. Este grupo de jóvenes, colocaba una serie de carteles y pancartas en el centro para que la visita no se produjese. Después de este episodio, el colegio suspendía la visita que tenía programada al memorial. No hay por tanto un acercamiento a la historia del terrorismo, pero sí a la de la ocupación. El diario 'El Correo' contaba hace unos días que este mismo centro, pero en el caso de la secundaria 'Ekialdea', ha realizado algunas, excursiones al barrio okupa de Errekaleor, en la capital alavesa.
Durante estas visitas, a los alumnos les mostraron y explicaron los murales pintados en las fachadas de este viejo barrio. En algunos aparecen "agentes de la Ertzaintza insultados y uno empalado por un unicornio blanco", o citas en francés de "Tout le monde deteste la police (todo el mundo odia a la policía)". En total ya son 150 alumnos, en seis grupos, los que han visitado este barrio, pero no el Memorial.
"Un proyecto educativo multidisciplinar"
Estas salidas han despertado el malestar de algunas familias del centro porque les parece "fuera de lugar". En contraposición, el Gobierno vasco lo ve con buenos ojos. De hecho, desde el Departamento de Educación, aseguran que estas excursiones entran dentro de un "proyecto educativo multidisciplinar en el ámbito de un cambio metodológico". Sin embargo, cuanto se trata del Memorial, dejan todo en manos de las decisiones de cada colegio. De hecho, fuentes de Educación consultadas por este periódico, aseguraban que actualmente no existe una estrategia conjunta del departamento para abordar esta temática en los colegios. Apuntaban que "no existe un plan común para los centros educativos y que está en manos de cada centro organizar y decidir qué actividades se incluyen en los planes de estudio".
Una muestra más de que la memoria del terrorismo sigue siendo una de las asignaturas pendientes del sistema educativo vasco. Aquel paso atrás del instituto alavés es una muestra más de lo difícil que es hablar de lo que supuso el terrorismo en las aulas vasca. Por contra, la escuela concertada sí ha realizado alguna visita. El delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, ya denunciaba el boicot en Ekialde como una "despreciable campaña, incomprensible e hiriente". A su juicio, es "evidente" que la labor pedagógica del Memorial en el recuerdo y respeto a todas las víctimas de la violencia es "imprescindible para desterrar de una vez por todas brotes de intransigencia como este".