Muchas familias tienen problemas para conciliar su jornada laboral con las responsabilidades del hogar y la familia. Así, el 28,7% de las personas ocupadas residentes en Euskadi afirma tener "muchas dificultades" para compaginar el trabajo con el cuidado de sus hijos menores y el 25,9% asegura tener ese mismo grado de dificultad a la hora de atender a las personas dependientes, según los datos elaborados por Eustat. Este alto grado de dificultad también lo percibe el 25,8% de las personas ocupadas cuando se trata de conciliar el trabajo con la realización de actividades personales.
En este contexto, el Gobierno vasco anunció ayer una nueva línea de ayudas, dotada con 392.857 euros, dirigida a organizaciones y empresas que tracen un diagnóstico y un plan de acción en materia de conciliación laboral y familiar. Estas ayudas, aprobadas este martes en el Consejo de Gobierno vasco, buscan facilitar la contratación de una asesoría técnica que ayude a empresas y asociaciones a conocer, interiorizar y promover la conciliación corresponsable en sus organizaciones, así como a retener el talento.
Por tanto, la conciliación implica equilibrar las diferentes facetas de nuestra vida, lo cual conlleva la necesidad de compaginar el trabajo remunerado con el trabajo doméstico, así como las responsabilidades familiares y el tiempo libre que destinamos al ámbito personal.
En lo que respecta a la satisfacción en general con el trabajo, la encuesta sobre la conciliación de la vida laboral, familiar y personal de 2022 de Eustat recoge una valoración general de 7,3 (sobre 10), con algunas diferencias según aspectos concretos. La variable peor valorada es la de la promoción laboral, con un 4,3; seguida por la flexibilidad de horarios y descanso durante la jornada laboral, con un 6,5; y la remuneración salarial (6,6). Los aspectos más valorados son la jornada laboral y la estabilidad (7,3) y las vacaciones y permisos (7,2).
Con relación a las preferencias laborales, ocho de cada 10 empleados vascos se decantan por la condición de asalariado frente a la de autónomo (15,6%). A su vez, el 62% de los encuestados prefiere trabajar en el sector público frente al sector privado (38,1%). Respecto al tipo de empresa, las preferencias están más equilibradas ya que algo más de la mitad prefiere trabajar en grandes compañías mientras que un 46,5% prefiere las pequeñas empresas.
Medidas para facilitar la conciliación
Dentro de las distintas posibilidades que facilitan la conciliación de trabajo, familia y vida personal, las ausencias temporales del trabajo están al alcance de la mayoría de la población ocupada, seguidas por la posibilidad de pedir días sin sueldo. Además, casi la mitad de las personas ocupadas manifiestan una dificultad para conseguir excedencias o reducciones de jornada.
Otra de las herramientas es el horario flexible de salida y lo disfruta casi la mitad de los ocupados cuyas empresas permiten la posibilidad. Desde el punto de vista del género son los hombres los más beneficiados, ya que un 50,6% disfruta de la flexibilidad horaria frente al 43,3% de las mujeres. Con respecto al año anterior se aprecia un aumento de 4,8 puntos en el porcentaje de personas que disfrutan de un horario flexible; si en 2020 el 42,3% de la población disfrutaba de esta medida que facilita la conciliación, en 2021 el porcentaje sube hasta el 47,1%.
En cuanto a la modalidad del teletrabajo, no se aprecian grandes diferencias con respecto al año anterior. Si bien ha aumentado el porcentaje de personas que trabaja en su domicilio de forma ocasional pasando del 7,3% al 10,3%, ha disminuido el de personas que lo hacen al menos la mitad de los días (del 10,8% al 8,4%). Así, Eustat apunta que el teletrabajo ha aumentado en 5,3 puntos porcentuales comparado con la situación laboral de hace 10 años.