Los bomberos interinos de Euskadi lo han vuelto a hacer. Una vez más se han concentrado, esta vez frente a la Diputación de Guipúzcoa, para denunciar el "oscurantismo" con el que, según ellos, se ha regido la OPE celebrada este pasado fin de semana para cubrir 114 plazas.
El pasado miércoles lo hacían frente a la Diputación Foral de Álava, donde se estaba celebrando un pleno de las Juntas Generales, y este viernes lo han hecho en San Sebastián, sin ropa y con carteles en los que se podía leer “Desprotegidos y manipulados”. Estas reivindicaciones llegan tras la publicación de los resultados de las pruebas que se llevaron a cabo este pasado sábado, a las que se presentaron 1.170 personas y en las que suspendieron el 75,5% de los aspirantes y más del 95 % de los interinos que ya están trabajando.
Los manifestantes han criticado que antes de la celebración de las pruebas "ya hubo acciones por parte del tribunal que hacían sospechar lo que podía ocurrir" con el desarrollo de la OPE, como publicaciones que incluso se eliminaban de la página web para "publicar otras con la misma fecha y distinto contenido". Con estas sensaciones llegaban los aspirantes al exámen del sábado 26 noviembre, cuando, para su sorpresa, se encontraron con exámenes en los que “las pruebas psicotécnicas se convertían en el factor determinante", pese a que en un principio los conocimientos iban a tener un mayor peso.
La Academia de Arkaute emitió un comunicado, antes de que se publicasen las notas, en el que se informaba que el número de aprobados de esta prueba iba a ser mayor al que los aspirantes esperaban. Sin embargo, cuando estas se hicieron públicas, y para “mayor sorpresa de los candidatos”, el número de aprobados descendió, y finalmente solo 287 personas de las 1.170 que se presentaron aprobaron.
Este viernes los opositores han rechazado la decisión del tribunal de rebajar las exigencias para las puntuaciones -con el objetivo de "calmar las aguas"-. "No nos van a comprar, no queremos rebajas, queremos OPE justas y transparentes acordes a nuestro puesto de trabajo y en el que no nos juguemos una plaza en un ejercicio de estas características", han advertido. Y han pedido la dimisión de las dos diputadas forales responsables de Gobernanza de Gipuzkoa y de Equilibrio Territorial de Álava, Eider Mendoza e Inma Basterra, respectivamente.