El pantano más pequeño de Álava.

El pantano más pequeño de Álava. Aventuphoto.

Sociedad

Este es el mar interior más pequeño y bello de Euskadi: el lugar más tranquilo donde ir de escapada

Este pantano, ubicado en la provincia de Álava, es el más pequeño del sistema del Zadorra, pero el más bello para decenas de turistas.

15 diciembre, 2023 14:00

Las montañas vascas albergan decenas de tesoros desconocidos en Euskadi. Entre ellos, los pantanos y lagos. Y es que este lugar lleno de naturaleza y que crea paisajes parecidos a los de Canadá contiene uno de los pantanos más bellos para decenas de vascos e ideal para visitar un fin de semana.

Ahora, con la llegada del invierno, los vascos buscan los mejores lugares para irse de relax y ¿qué mejor que acudir a uno de los lugares más sorprendentes de la provincia de Álava? 

Pantano de Albina: relax asegurado

Este pantano, ubicado en la provincia de Álava, es el más pequeño del sistema del Zadorra, pero el más bello para decenas de turistas. Extendido a lo largo de cuatro kilómetros y adoptando una forma alargada crea, junto a las peñas de Aramaio, los prados verdes del valle y el pantano, uno de los lugares más impresionantes. Se trata, además, de uno de los espacios más relajantes para encontrar la paz por el silencio que aporta. 

Este se ubica sobre el río Albina y a 22 minutos de la capital alavesa Vitoria-Gasteiz, cerca de la carretera que ofrece uno de los entornos rodeados de bosques más bonitos. 

No se permite el baño ni la navegación, aunque tiene un área nudista, tan solo la pesca. Y es que este pequeño secreto es muy conocido por los pescadores al ser uno de los primeros sitios donde pudieron pescar el lucio. Aunque su pesca no es fácil, existen grandes ejemplares en este lugar. 

También puede encontrarse la carpa, aunque no es un embalse donde se pueda pescar fácilmente debido a su abundancia de cangrejo. Las loinas y los barbos, por su parte, han desaparecido casi por completo del embalse. 

¿Qué ver cerca del pantano?

A tan solo 22 minutos en coche se encuentra la capital de Euskadi, Vitoria-Gasteiz, ideal para pasar la tarde tras visitar el pantano. Una ciudad cómoda, fácil de ver y con un gran patrimonio histórico y cultural. Uno de las construcciones más importantes es la Catedral Gótica de Santa María, con más de un millón de visitantes a sus espaldas. Como curiosidad, novelistas como Ken Follet y Toti Martínez de Lezea se inspiraron en esta preciosa catedral para contar sus historias. 

También contiene la típica Plaza de la Virgen Blanca o Plaza Vieja, uno de los espacios más bonitos que rodean los llamativos balcones y con un monumento sobre la batalla de Vitoria contra las tropas de Napoleón en el centro. Justo este punto da acceso a la Plaza Nueva de tipo neoclásico. 

La Catedral de Santa María, en Vitoria-Gasteiz.

La Catedral de Santa María, en Vitoria-Gasteiz.

Otra plaza importante es la del Machete, justo al lado de la Plaza de la Virgen Blanca. Contiene este nombre por el machete que guarda en la Iglesia de San Miguel. Sobre este juraban los cargos quienes representaban la ciudad. 

Y, por supuesto, algo de lo que nadie tiene que olvidarse es del casco histórico, con un trazado medieval e impresionantes calles. Alberga unas de las construcciones más relevantes, como los palacios de Villasuso, Bendaña, Montehermoso y Escoriaza-Esquivel. Así como la Iglesia de San Pedro o la Casa del Cordón, donde residieron de paso Felipe el Hermoso y Juana la Loca.