La Copa ya está en casa y tiene color rojiblanco. El pasado 6 de abril se celebró el partido entre un Mallorca y un Athletic Club a la altura que puso punto final a la Copa del Rey. Un partido que dejó eufóricos a todos los athleticzales en el estadio de La Cartuja (Sevilla). Han pasado 40 años desde la última vez que lo consiguieron en aquel lejano 1984 y tenían que vivir el momento. Un antes y después que marcó a Sevilla.
Buena parte de Sevilla no tardó en teñirse de rojo y blanco y de cánticos antes de celebrarse la final. Incluso dos novios se llevaron la sorpresa de casarse, salir de la iglesia y toparse con buena parte de la grada delante de sus ojos animándoles. La felicidad y el buen ambiente se palpaba en el aire y no dudaron en acompañarlo con unos pintxos o tapas y unas bebidas.
El precio de lo que pidieron
Sevilla acabó, por supuesto, encantada con la afición del Athletic debido a la inyección económica que supuso la celebración del partido en la ciudad andaluza. Especialmente, el restaurante La Vicenta de la calle Santa Vicenta María número 6 vivió un caso muy especial y es que un grupo de athleticzales dejó una cantidad de 2.254,60 euros en comida y bebida.
El grupo de 36 personas, como se recoge en el artículo El camarero sevillano que sirvió las 290 cañas a la cuadrilla del Athletic: «Invitaban a la gente y dejaron buena propina» de EL CORREO, consumieron, en este popular local, 290 cervezas por 522 euros, 14 platos de gambas por 210 euros, 29 botellas de agua por 40 euros, 9 barcelós por 63 euros, 10 rebujitos por 50 euros, 7 platos de calamares de potera por 350 euros, cuatro kalimotxos por 20 euros, 5 tintos de verano por 13 euros y 7 cachopos por 168 euros, entre otros.
Además, un trabajador declaró para este medio que invitaban "a muchas personas" que se acercaban a la terraza. "Se ponían a charlar con otros hinchas y les sacaban cuatro cañas". Al final acabó siendo una factura que se pagó "en metálico" y que tocó a poco más de 60 euros por persona. A La Vicenta no le faltó siquiera una propina.