El sándwich es una de las comidas más populares del mundo por ser un alimento sencillo, exquisito y por ser de gran ayuda en momentos de prisa. Además de existir como un producto que saca de cualquier apuro a cualquiera, el sándwich se puede comer no solo en el desayuno, sino en la comida, merienda o cena. Este se originó hace años, según la revista gastronómica Bon Viveur en su artículo El curioso origen del sándwich y por qué se llama así, cuando a la acción de introducir ingredientes entre pan y pan comenzó a llamarse 'sándwich' en el siglo XVIII.
El político y conde de Sandwich John Montagu IV (1718-1792), solicitó algo rápido para degustar "sin cubiertos ni platos" y que "le permitiera no distraerse de sus obligaciones, ya fueran administrativas o lúdicas". Así que no tardó en extenderse la idea de introducir ingredientes entre pan y pan, "para no mancharse las manos".
"La mención escrita más antigua que se conoce del término es atribuida al historiador Edward Gibbon en 1747, justamente las fechas en las que puede datarse la invención, al describir un sándwich de carne fría servido en una cafetería de la nobleza". Desde "ese primer sándwich" se elaboraron otras "muchas versiones por todo el mundo". Una de ellas fue la del sándwich mixto o el famoso 'bikini', que se popularizó en toda España en la década de los 50 gracias a la llegada de las cafeterías.
El truco de Martín Berasategui
Con el paso de los años la receta se ha ido innovando y se han incorporado nuevos alimentos al sándwich. El chef vasco Martín Berasategui, de 12 estrellas Michelin y el chef Erlantz Gorostiza conocen algunos trucos para que esta sencilla y barata comida quede muy profesional. Son dos propuestas, adaptadas a todos los gustos y bolsillos, las que ofrecen.
Una de ellas es el Croque-Madame de Berasategui. Se trata de una receta francesa compuesta por queso tierno y curado, jamón cocido y huevo. Primero hay que freír el pan hasta que quede dorado, por lo que hay que untar ambas rebanadas de pan en mantequilla por los dos lados e incorporarlas en la sartén a fuego lento. A continuación, en un bol incorporamos los dos tipos de queso, la yema de huevo, la nata y la pimienta y untamos las rebanadas con esta mezcla. Sobre una de ellas ponemos dos lonchas de jamón y un poco de esa crema por encima y se gratina el resultado en el horno. Una vez listo, se prepara un huevo a la plancha en la sartén y se coloca en la parte superior.
La otra propuesta es el sándwich Jara con jamón ibérico, a base de jamón ibérico asado, rúcula y salsa Gribiche, entre otros ingredientes. Primero se unta el pan con la mantequilla y se tuesta en la sartén a fuego lento. Una vez listo, la rebanada se pasa por la salsa Gribiche y se añade la rúcula salteada, el jamón, la salsa y otra vez la rúcula. Se unta, posteriormente, la otra rebanada con mantequilla y, por la otra cara, la salsa Gribiche. Se dora todo.