Euskadi es igual a excelencia culinaria. Un territorio donde la gastronomía vasca de toda la vida se fusiona con la modernidad para ofrecer nuevas experiencias. En los numerosos restaurantes que se hallan en la región se pueden degustar sabores auténticos del País Vasco elaborados a partir de los mejores productos de mar. 

Desde pescados y mariscos frescos capturados en el Cantábrico hasta carnes y verduras de la más alta calidad provenientes de sus tierras. Cada plato es una celebración de los ingredientes locales. Los chefs vascos, reconocidos mundialmente, han sabido mantener viva la tradición mientras incorporan toques modernos que realzan aún más la riqueza de esta cocina. Comer en Euskadi es una invitación a disfrutar de una de las mejores gastronomías del país, en un entorno donde cada comida se convierte en un verdadero festín para los sentidos.

Un restaurante es bueno cuando pasan camioneros habitualmente por el local. Eso se dice. Siempre y cuando se hagan las cosas de forma correcta y se preparen menús abundantes y baratos no hay de qué preocuparse. La clientela llegará sola y, después, decenas de comensales y personalidades importantes. Llegados a este punto se sabe que un local ha triunfado. 

El tesoro de Gipuzkoa 

El Restaurante Asador Bedua, en pie desde 1948, lo consiguió y enamoró a los exfutbolistas del Real Madrid, Xabi Alonso, y del Atlético de Madrid, Mario Suárez. Así como al director de cine Oliver Stone, al cantante Fito y al gran chef Pedro Subijana, entre otros.

Este mágico local escondido en medio de la naturaleza, en el barrio de Bedua (del municipio guipuzcoano de Zumaia), permite degustar las mejores obras culinarias al lado del río Urola basadas en alimentos frescos extraídos directamente de su huerta, que se sitúa en una isla y a la que se puede acceder por un puente romano.

El cliente, según la página web del propio restaurante, se topará con tomates, pimientos guindilla, varios tipos de lechuga, cebolla, calabaza, puerro, perejil, tomates cherry, berza, limones, calabacines, guisantes, manzanas o patatas, entre otros. Productos que pasarán a formar parte de unos platos tradicionales vascos marcados por la parrilla: su seña de identidad. 

Permiten, además, la degustación de tres menús diferentes (Txanala, Itzurun y Urola) desde 100 euros. La parrilla de Bedua, que la maneja Jose Mari Iriondo, quien recibió un premio en 2017 al Mejor Tratamiento de la Txuleta, es todo un icono del restaurante. Todo pasa por ahí, desde las verduras, hasta los mariscos, pescados y carne. 

Su carta se divide en varias secciones, por lo que es bastante variada. Primero, el cliente se topará con las 'verduras y ensaladas', que abarca desde el salpicón de bogavante y la ensalada de txangurro hasta los pimientos verdes de Bedua y sus guindillas. La carta también ofrece unos entrantes de bonito en aceite, anchoas en aceite, foie de la casa, tortilla de patata o sopa de pescado, entre otros.

Así como una variedad de mariscos (cigalas rebozadas, ostras, txangurro al horno, percebes, almejas y gamba) y pescados, que van desde el virrey, rape, mero, besugo, cogote, rodaballo, lenguado, cocochas y taco de merluza a la parrilla, hasta bacalao en salsa verde o frito con pimientos, angulas, merluza rebozada, cocochas rebozadas y en salsa verde, y el rape rebozado. No hay que olvidar su famoso chuletón a la parrilla premium.