La gastronomía vasca se encuentra llena de carácter y de unos sabores sorprendentes. Cuando pensamos en ella se nos vienen los pintxos a la cabeza, pero esta guarda mucho más. Desde el famoso marmitako, los txipirones en su tinta o el bacalao al pilpil hasta el bacalao a la vizcaína o el sukalki, entre otros platos típicos. 

Euskadi es cultura, es historia, es sabor y es gastronomía. Es en este territorio donde uno puede sentirse como en casa y donde puede disfrutar de los mejores restaurantes para comer o para irse de pintxos. Sin embargo, no es una región muy barata para salir a comer y es por ello que muchos, cuando deciden acudir a por un menú del día, ya no miran tanto por la calidad de este sino por su precio. Cabe mencionar, además, que los menús del día se han encarecido en general con el paso del tiempo y que muchos de ellos ya no cumplen con el objetivo de ser económicos. 

Los menús nacieron en el siglo XX. Durante el franquismo y con el florecimiento del turismo, en 1965, el ministro de Información y Turismo, Fraga Iribarne, ejecutó unas medidas de promoción para atraer a los turistas a la península. Todos los establecimientos de comida tenían que servir un 'menú turístico' a precio fijo. La idea era abaratar los precios frente a otros países: así, los turistas tendrían un menú completo y muy barato. Así lo señala LA SEXTA en su artículo El origen franquista del menú del día: la iniciativa de Fraga para fomentar el turismo

Un buen menú del día a buen precio en Vitoria

El menú turístico pasó a ser 'menú del día' en el 71. En esta época, España se estaba modernizando y se estaba convirtiendo en un país de gente que no podía comer en su casa, sino fuera. Por lo que el franquismo introdujo el 'menú del día' en todas partes y el plato combinado y una moderación de precios. Con la llegada de la democracia, los menús del día pasaron a ser 'menú de la casa' y ya no era obligatorio que tuviese un precio fijo.

Desde que se pudieron modificar los precios de los menús y teniendo en cuenta el encarecimiento de la vida, estos aumentaron mucho de precio. Sin embargo, hay algunos locales que todavía mantienen la tradición de ofrecer un gran menú del día a muy buen precio. Este es el caso del restaurante Mirador de Salburua, en Portal de Zurbano número 17 de Vitoria-Gasteiz. Un local acogedor de comida casera y tradicional en pleno centro y en el que cambian el menú todos los días, según aseguran ellos mismos desde su propia web. 

El menú del día, por 16 euros, se compone de cinco primeros, cinco segundos y cinco postres. Entre los primeros destacan, por ejemplo, la ensalada de txipirones fritos con pimientos asados, aceitunas, cebolleta, tomate y yemas de espárrago con vinagreta de txangurro; el potaje del día, fideuá de calamares, langostinos y mejillones con alioli de ajo-perejil; el guiso marinero de patatas, txipirones y pescado con almejas; y la ensaladilla rusa con pulpo y aliño de pimentón. 

De segundo, el comensal podrá optar por el entrecot de ternera al Roquefort con su guarnición; la parrillada de carne con chimichurri, patatas y piquillos; el cordero asado con patatas panaderas y ensalada; las carrilleras de ternera guisadas en su jugo con puré de patata cremoso y setas a la plancha; y del bacalao noruego con refrito de ajo-guindilla y piperrada. De postre destacan el flan casero, el yogurt casero de frutos rojos con avellanas, la fruta del día, el arroz con leche casero, yogur natural o cuajada; o los helados o tartas. 

Quienes prefieran pueden escoger exquisitos platos de una variada carta a partir de 11,50 euros compuesta de entrantes, pescados y parrilla y postres. Sobresalen la ensalada de pulpo con patata confitada, pimientos asados en casa, alioli de pimentón de la Vera y su aliño, la ensalada de bacalao con verduritas escalibadas y vinagreta de txangurro, la merluza rellena de txangurro con crema de marisco, el  bacalao con pimientos asados, donostiarra y langostino en tempura, los txipirones a la plancha con tosta de patata, cebolla glaseada y refrito, la merluza con refrito al estilo Orio con gambas fritas, el chuletón de vaca a la piedra con su guarnición, las carrilleras de ternera guisadas con su tosta de foie y el Goxua casero con caramelo.

Ubicado en un entorno único como los Humedales de Salburua, este restaurante, además de ofrecer unos menús y carta únicos, guarda una extensa barra de pintxos. Como destacan desde su propia web, disponen de esta amplia barra para que uno pueda desayunar, almorzar o disfrutar de un temtempié cuando desee. 

"Toda nuestra gran variedad de pintxos, nuestro menú del día, nuestros menús especiales y todos los platos de nuestra carta están elaborados y cocinados de forma tradicional y con productos frescos todos los días", señalan. Así se aseguran de ofrecer calidad y variedad al "mejor precio" y crean platos sanos y deliciosos poniendo el foco en los "paladares exigentes".