"Esto es inadmisible. Pido disculpas a los aficionados de la Roma que han podido salir perjudicados, pero que no empañe el partido que hemos hecho". Así se tajante se mostró el capitán del Athletic Club, Óscar de Marcos, tras lo sucedido anoche en el encuentro entre los vizcaínos y la Roma en el primer duelo de Europa League en la capital italiana.
El lanzamiento de bengalas por parte de un grupo de radicales del Athletic Club a la afición rival hará que la entidad presidida por Jon Uriarte tome medidas sobre lo vivido. Unos hechos que desde el Athletic califican como "actitudes que no representan los valores del club, que se basan en el respeto, la deportividad y la convivencia". Añaden que "el Club va a trabajar por erradicar estos comportamientos, tolerancia cero. Esta minoría no representa a nuestra afición".
"No podemos manchar esto"
Otros dos representantes tan icónicos del Athletic Club hablaron sobre el incidente. Por un lado, el entrenador Ernesto Valverde no quiso desaprovechar la ocasión en sala de prensa para valorar lo sucedido y explicar que "para todos nosotros el fútbol es una fiesta, venir aquí, ha venido un montón de gente para animarnos, para vivir un día especial de la vuelta a Europa".
El lanzamiento de bengalas por parte de un pequeño sector "no representa a todo el mundo. No podemos manchar eso con tirar alguna bengala al público rival. Eso no es bueno, eso no es fútbol. No me gusta".
Misma opinión que compartió uno de los capitanes del primer equipo, Iñaki Williams. El internacional por Ghana no dudó en acercarse a esa zona de la grada nada más finalizar el encuentro ante el conjunto romano y dijo, de forma muy clara: "No hay que lanzar bengalas aquí, hostias".
Tanto club como jugadores han expresado su malestar por lo sucedido y no han dudado en pedir perdón a la afición rival y a la propia Roma, club al que se midió anoche en el Estadio Olímpico.