Arnaldo Otegi / EUROPA PRESS
Otegi vuelve a su pasado más oscuro al aplaudir a los 'gudaris'
El líder de EH Bildu parecía regresar a tiempos pretéritos con su discurso del Aberri Eguna
Más información: Otegi recuerda a 'Txiki' y 'Otaegi' y entona el "eusko gudariak"
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Flaco favor hizo Arnaldo Otegi a la formación que lidera, EH Bildu, el pasado domingo en el Aberri Eguna (día de la patria vasca). Al final del acto celebrado en Pamplona, el secretario general de la coalición abertzale recordaba a los etarras 'Txiki' y 'Otaegi', fusilados por la dictadura franquista, y pedía a los asistentes entonar el "eusko gudariak" como fin de fiesta.
Otegi regresaba a su pasado. En concreto, al lado más oscuro de la izquierda abertzale -hoy Sortu- que comanda Bildu. Porque así, con ese cántico y ese tipo de discursos, terminaban los mítines de Herri Batasuna, Euskal Herritarrolk, Batasuna y el resto de marcas de la izquierda abertzale más ortodoxa.
Que esos dos miembros de ETA fueran condenados a muerte por el dictador no justifica este aplauso, ni mucho menos, porque hablamos de terroristas, sean en un momento u otro de la historia. Y criticar sus hechos o el aplauso de Otegi tampoco supone, ni muchísimo menos, defender al sanguinario dictador. En esa visión maniquea de la realidad se mueven precisamente quienes no han comprendido la historia reciente de Euskadi.
El fondo y las formas que exhibió Otegi en Pamplona, presentando a los fusilados como dos luchadores heroicos contra el fascismo, chocan de frente con el giro estratégico y moderado de EH Bildu. Un flaco favor, en suma, a su formación y a la propia convivencia.
