Muere el número 1 del Athletic Club, el socio más antiguo: "86 años de carnet, toda una vida rojiblanca"

El Athletic Club ha amanecido hoy con una de sus noticias más tristes. En la mañana de este lunes se conocía el fallecimiento de Juan Antonio Virumbrales, quien hasta agosto de 2025 ostentaba el honor de ser el socio más veterano de la afición rojiblanca.

La entidad bilbaína ha transmitido sus más sinceras condolencias, extensivas a familiares y amigos, por la pérdida de una figura que no era un socio más. A sus 99 años, Virumbrales acumulaba nada menos que 86 como miembro del club, una trayectoria que encierra toda una vida dedicada al Athletic, a su equipo y a sus colores.

Su vínculo con la institución comenzó el 1 de septiembre de 1939, fecha en la que se convirtió en socio. Desde entonces, se erigió en un verdadero referente para la familia athleticzale, siempre recordado por su energía y entusiasmo a la hora de defender al Club.

Juan Antonio no se limitó a ser un socio de carnet: estuvo siempre ligado de algún modo a la vida rojiblanca. Incluso en sus últimos años participó en iniciativas como la última campaña de Navidad. “86 años de carnet, toda una vida rojiblanca”, destacó el Athletic Club, subrayando su entrega incondicional.

Pese a su avanzada edad, se mantuvo activo, asistiendo con regularidad a las Asambleas y aportando siempre desde el respeto y la construcción. En 2022 recibió un emotivo homenaje en San Mamés, impulsado por la Herri Harmaila, en reconocimiento a su implicación con la Grada Popular de Animación.

Más que un socio, Juan Antonio Virumbrales fue parte viva de la historia del Athletic.

Filosofía 'Made in' Euskadi

"Nuestra filosofía deportiva se rige por el principio que determina que pueden jugar en sus filas los jugadores que se han hecho en la propia cantera y los formados en clubes de Euskal Herria, que engloba a las siguientes demarcaciones territoriales: Bizkaia, Gipuzkoa, Araba, Nafarroa, Lapurdi, Zuberoa y Nafarroa Behera, así como, por supuesto, los jugadores y jugadoras que hayan nacido en alguna de ellas".

Esta filosofía ha generado un equipo con una base sólida de jugadores locales, muchos de los cuales han pasado por las categorías juveniles del club. La promoción de talento interno no solo se ve como una estrategia deportiva, sino también como un medio para mantener y fortalecer los lazos emocionales entre el equipo y su comunidad.

En un mercado de fichajes donde los clubes suelen buscar talento a nivel mundial, el Athletic Club se enorgullece de mantener su esencia única. Los jóvenes jugadores de la cantera tienen la oportunidad de forjar una carrera profesional en su club de toda la vida, contribuyendo así a la rica historia del Athletic.

La decisión del club de resistir las presiones del mercado internacional y mantener su enfoque local ha sido recibida con el apoyo de los aficionados, que ven en ello un acto de lealtad hacia las raíces del equipo. Mientras el Athletic Club de Bilbao continúa desafiando las normas del fútbol moderno, su filosofía de fichajes se mantiene firme, construyendo un equipo que no solo busca el éxito en el campo, sino también preservar la identidad única del club.