Economía

La conexión ferroviaria de Euskadi con Madrid sufre un nuevo retraso en Castilla y León

El tramo Baños-Burgos no empezará la formación de los maquinistas hasta finales de mayo

31 marzo, 2022 05:00

Mes y medio después de que las instituciones vascas rubricaran con el Gobierno central la encomienda de gestión para acelerar la Y vasca, la conexión ferroviaria de Euskadi con Madrid sufre un nuevo retraso en Castilla y León. Esta vez, en el tramo ferroviario entre Venta de Baños y Burgos, una conexión clave para entrelazar el AVE vasco con la red del resto de España y que, una vez hecha, acortará el viaje a Madrid en media hora. Según fuentes de Adif, este tramo ferroviario en la fase de pruebas del sistema europeo de gestión del tráfico ferroviario -un mecanismo fundamental para garantizar la seguridad y asegurarse de que se puede hacer una correcta gestión del tráfico ferroviario- a velocidad máxima.

De cumplirse los plazos con los que ahora trabaja el operador ferroviario, que están condicionados a que varias pruebas concluyan con éxito -en septiembre de 2021 ya tuvieron que repetirse las pruebas de seguridad- el expediente de puesta en servicio de este tramo se entregaría a finales de mayo a la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF). Un plazo más que lejano para un trazado de alta velocidad que se esperaba que se pusiese en marcha antes del final de este mes de marzo, que posteriormente se retrasó a el primer semestre y que recientemente ya ha sido señalado "para los próximos meses" por la ministra de Transportes, Raquel Sánchez. Además, el expediente de puesta en servicio solo abriría la opción de que los maquinistas empezasen a recibir la formación necesaria para mover el AVE por ese tramo ferroviario, pero esa circulación en pruebas para los maquinistas también podría posponerse más, ya que sería el operador ferroviario quien decidiría cuándo se van a llevar a cabo esos recorridos.

La línea, que suma más de 95 kilómetros de plataforma, comunica Burgos con la línea Madrid-Valladolid-León y dará continuidad a los trenes transversales León-Burgos y Madrid-Euskadi. Sobre el trazado que une la capital castellana con Vitoria, la ministra Sánchez mencionó en febrero que antes de marzo se licitaría la redacción del proyecto constructivo, un paso determinante para poder afrontar su construcción. Por el momento lo que sí está aprobado es el estudio informativo de la conexión entre Vitoria y Burgos, con una inversión de 1.200 millones de euros y una velocidad máxima de 350 kilómetros por hora.

La previsión de finales de mayo podría sufrir, en cualquier caso, más modificaciones, ya que esa fecha "viene determinada por el desarrollo de todo el proceso del sistema europeo de gestión del tráfico ferroviario y los resultados y/o posibles incidencias que se van obteniendo", según señalan fuentes de Adif. En cualquier caso, la Y vasca no estará lista, como pronto, hasta 2027, de modo que queda lejana todavía la posibilidad de coger el AVE en Vitoria, Bilbao o Basauri para bajarse en la madrileña estación de Atocha.

Sin conexión a Francia

Tampoco servirá para una hipotética conexión con Francia, ya que esta misma semana se ha conocido que el trazado de alta velocidad entre Burdeos y Toulouse no se inaugurará hasta 2032 y que la conexión de Francia con la Y vasca podría no estar lista hasta 2037 en el mejor de los casos pese a la presión de la Unión Europea por conectar Madrid y París pasando por Euskadi.