Ni 4,1% para final de año ni 2,1% para 2023. BBVA vuelve a contradecir al Gobierno vasco y asesta un nuevo golpe a la economía vasca revisando otra vez las previsiones de la comunidad autónoma. Según el equipo de investigadores de BBVA Research, Euskadi cerrará el 2022 con un crecimiento del 3,5% -más cerca del 3,9% interanual con el que se cerró el tercer trimestre según los datos de Eustat- y tendrá un 2023 prácticamente plano en cuanto a la evolución del PIB.
El equipo que lidera Miguel Cardoso augura que Euskadi solo crecerá un 0,3% durante el año que viene. Así las cosas, Euskadi llegaría a 2024 a un 2,2% de recuperar el PIB de 2019, previo a la pandemia. El impacto de la caída de las exportaciones -con socios como Alemania o Reino Unido con amenaza real de recesión- y sus efectos en la actividad industrial -a la que Hacienda ya le auguró un cierre de 2023 en negativo- son los factores que tiran para abajo de las previsiones del banco vizcaíno.
Aun así no se descarta que el fin de los cuellos de botella y lo que quede de ahorro durante la pandemia -en Euskadi más que en el conjunto de España puedan ayudar a pasar mejor un año en el que el pronóstico, de entrada, es el de una economía prácticamente frenada en seco por la pérdida de poder adquisitivo que ha traído la inflación. De hecho, la ralentización ya está aquí: el Eustat publicaba este lunes un avance de apenas un 0,2% durante el último trimestre -el del hipotético 'verano de la venganza'- y la balanza comercial de Euskadi se ha vuelto negativa tras unos meses récord de exportaciones.
De hecho, sobre estas últimas cifras, las de exportaciones, el Observatorio Regional publica un dato muy revelador: en términos reales, descontando el factor de los precios de la energía, Euskadi ha vuelto a niveles de exportaciones inferiores a los prepandemia durante el tercer trimestre del año.
Donde más productividad y mayores costes laborales
El estudio de BBVA también deja al País Vasco como la comunidad autónoma donde más han crecido los salarios por convenio negociado durante este año, con un 5% de media muy superior a la media nacional, de en torno a un 2,7%. Pese a ello, Euskadi es la comunidad más productiva de España.
Entre las cifras de BBVA aparece otra que corrobora las tesis que ha venido defendiendo la parte jeltzale del Gobierno vasco: que los fondos europeos no estaban siendo justos con Euskadi. La comunidad autónoma, efectivamente, es la segunda que menos dinero ha recibido proporcionalmente, solo por detrás de Madrid. A esas quejas del PNV siempre ha respondido el Ejecutivo central que el momento de que Euskadi recupere ese 'gap' será cuando se vayan poniendo en marcha los distintos PERTE. De momento, a la espera de una resolución definitiva del PERTE del coche eléctrico, Euskadi cuenta con más de 200 millones entre los proyectos de Mercedes, Irizar, Fagor y SAPA.
El crecimiento económico tan plano de Euskadi en 2023, solo peor que el de Galicia, Asturias y Navarra, dejará a la comunidad autónoma a las puertas del 2024 aún a un 2,2% del PIB para que la economía vasca vuelva a los niveles de 2019, solo en mejor tesitura que los dos archipiélagos, a los que la inflación está haciéndoles mucho daño en su oferta turística. En 2023, Euskadi, además, no creará empleo: se quedará en las mismas cifras de paro.