La reforma laboral de 2022, llevada a cabo por Yolanda Díaz con el objetivo de acabar, en gran medida, con la temporalidad presente en algunos sectores económicos, impulsó en Euskadi el crecimiento de los contratos fijos discontinuos. Lo hizo durante el propio 2022 y gran parte de 2023; sin embargo, y a pesar de que se están registrando datos de empleo históricos, parece que en los primeros meses de 2024 este tipo de contratos se ha desinflado, especialmente en el sector público vasco y la hostelería.
2022 cerró con 34.672 contratos fijos discontinuos de los 155.069 contratos firmados, un 22,36% del total, según el SEPE. Porcentaje, que permitió al Ministerio de Trabajo y Empleo reafirmarse en el buen hacer de su reforma laboral. Sin embargo, en solo un año esta cifra comenzó a bajar: a cierre de 2023 de manera prácticamente imperceptible, ya que de los 162.166 contratos fijos que se firmaron, 35.081 fueron fijos discontinuos, un 21,63%; en 2024 de manera más evidente.
En lo que va de año, a marzo de 2024 en Euskadi se han firmado 5.838 contratos fijos discontinuos frente a los 37.423 contratos fijos totales. Esto supondría que del total firmados solo un 15,60% serían de este tipo, casi siete puntos menos que hace dos años. Prácticamente la mitad de ellos se han firmado en Bizkaia, 2.549, en Álava se han firmado 1.650, y en Gipuzkoa 1.639. Además, del total 3.155 han sido firmados por hombres y 2.683 por mujeres.
15 puntos menos que en Navarra
Esta cifra de contratos fijos discontinuos choca con la de comunidades vecinas que, si bien en términos generales registran cifras mucho más bajas que Euskadi, su porcentaje de contratos fijos discontinuos del total de contratos fijos a día de hoy, es notablemente más alto que en este territorio.
Así, hasta abril de 2024 y frente al 15,60% de este territorio, en Cantabria se han firmado 9.124 contratos fijos de los que 1.962 son fijos discontinuos, un 21,11%. En La Rioja, en lo que va de año, se han firmado 7.041 fijos de los que un 27,35%, 1.926, son fijos discontinuos. Y en Navarra, se han firmado 12.279 contratos fijos de los que un 30,47%, 3.741, son fijos discontinuos.
Los fijos discontinuos se desinflan en Euskadi tras el subidón de la reforma
Cifras récord
A pesar de estos datos, el mercado laboral vasco lleva meses registrando datos positivos. Cerró 2023 con una tasa de paro del 6,33%, la más baja de todas las comunidades y prácticamente la mitad de la media registrada a nivel nacional, situada en el 11,76%.
En esta línea, Euskadi fue, al cierre del pasado año, la segunda comunidad con la segunda mayor bajada porcentual del paro, un 25,10% menos, solo superada por Cantabria, una caída mucho mayor que en el conjunto del Estado (que bajó un 6,40%). Además, de registrar el dato más bajo de parados desde el año 2008, 107.779 desempleados; el territorio también registró a cierre de 2023 su cifra de afiliados a la Seguridad Social más alta, con 1.012.947 cotizantes.
En 2024, si bien en los tres primero meses se produjo el denominado 'repunte de Navidad', se ha conseguido frenar y mantener estas buenas cifras. Con una tasa de paro del 7,9%, se registra un punto porcentual menos que en el mismo periodo de 2023, lo que supone una bajada de casi 10.000 personas en el desempleo en doce meses.