La FP crece este curso un 9% y prevé alcanzar las 52.000 matrículas en Euskadi

La Formación Profesional cobra atractivo entre los jóvenes vascos como una alternativa a los estudios universitarios muy demandada, a su vez, por las compañías que buscan un relevo generacional para sus trabajadores. Su alto porcentaje de inserción laboral, fomentado en gran medida por las tempranas prácticas que se ofrecen en muchos centros, está dejando cifras que incrementan exponencialmente cada año. Por eso, se espera que este curso se matriculen más de 52.000 estudiantes en las diferentes opciones de FP. 

Así lo confirma Julen Elgeta, presidente de la Asociación de Centros de Formación Profesional Abantean de Euskadi (HETEL), cuyos centros tuvieron un índice de inserción laboral medio cercano al 80% en el último curso, llegando incluso al 90% en los ciclos industriales. Y es que aunque los grados más demandados son de la rama sanitaria, “como cuidado de personas, en el que apenas hay plazas libres”, es en los industriales donde Elgeta pone el foco. 

Y lo hace porque tal y como asegura, “en ciclos formativos de electricidad y electrónica, por ejemplo, hay una empleabilidad del prácticamente del 100%”. Según Confebask, alrededor del 50% de los perfiles en Euskadi son de FP, cifra que aumenta hasta el 65% en el caso del ámbito industrial. “Las empresas vascas crecen y necesitan un relevo generacional, por eso nos piden directamente estos perfiles. Hay ocasiones que incluso no los podemos ofrecer porque no hay tanta gente”... Por eso Elgeta hace un llamamiento a todos aquellos jóvenes interesados en el ámbito industrial, “aunque cada año hay más gente inscrita en estos grados, en Euskadi tenemos un tejido industrial que requiere mucho empleo”. Tejido industrial cuyas empresas, “multinacionales y pymes”, no dudan en contactar con los responsables de estos centros en busca de nuevos trabajadores.

El exlehendakari, Iñigo Urkullu, visita uno de los centros de FP en enero de este año EFE

Un 9% más que el año anterior

Ofrecer más perfiles industriales a las compañías es sin duda uno de los retos que Elgeta se marca para este próximo curso, temporada que arrancará en septiembre con cifras más positivas de lo previsto. Por un lado, los centros de Formación Profesional ofrecen para 2024-2025 entre 2.500 y 3.000 plazas más que el año pasado. Por otro, se espera que las matrículas superen las 49.000 registradas el año pasado en Euskadi -”llegaremos a las 52.000 probablemente”, insiste Elgeta-; cifra que lleva 15 años ascendiendo consecutivamente y que se calcula, ya que todavía no ha acabado el proceso de matriculación, gracias a la tendencia que se ha visto en el trámite de prematrícula, que ha crecido un 9% respecto al año anterior.

Uno de los grandes secretos del crecimiento de estos estudios, explica, es la pronta entrada en las empresas: “Los estudiantes se incorporan desde primero, y en segundo vuelven a hacer prácticas, algo que es super enriquecedor para los alumnos y las propias empresas que tienen 600 horas a un alumno al que le facilitan la inserción laboral”. Además de una alta empleabilidad motivada por el conocimiento entre empresas-alumno dado durante los dos años, Elgeta señala otros factores que influyen como “una tecnología top o una metodología novedosa…Es el conjunto de todas estas cosas lo que hace a la FP atractiva”. 

El 10% de los estudiantes se van de Erasmus

Del total de estudiantes que actualmente cursan algún grado de FP un 10% decide pasar tres meses en empresas del extranjero para incrementar sus conocimientos. Un movimiento que incrementó tras la pandemia y que los alumnos vascos utilizan no para quedarse en estos destinos sino para “tener una experiencia europea, volver y aportar lo aprendido en estas empresas a Euskadi”, indica Elgeta. 

“Cada vez alumnos con más edad”

Si bien estos estudios nunca han tenido una edad determinada para realizarse, el presidente de HEGEL señala que cada vez los alumnos comprenden edades más diferentes… “Gente que ha estado trabajando en otros ámbitos o estudiando otras cosas y vuelve para formarse más. Esa es una de las riquezas de la FP, que en un grupo te puedes encontrar de todo”. Sin embargo, y aunque las edades de los alumnos han cambiado en los últimos años, algo que no lo ha hecho es el género. Por tanto, esto es otro de los retos pendientes, tal y como concluye Elgeta, para los próximos años: “Sigue desequilibrado, en la rama industrial predominan los hombres y la sanitaria las mujeres”.