El Supremo condena al Gobierno vasco a pagar 2 millones a Eroski
El Supremo ha confirmado la condena impuesta por el Tribunal Superior de Justicia
17 febrero, 2021 17:26El Supremo ha rechazado admitir a trámite un recurso presentado por Eroski en el que reclamaba al Gobierno vasco una indemnización de 9,6 millones de euros y ha confirmado la condena impuesta por el Tribunal Superior de Justicia, que limitaba esa compensación a dos millones de euros. El fallo, al que ha tenido acceso Efeagro, hace referencia al conflicto abierto por Eroski por considerar que la compañía se vio perjudicada cuando se le negó el permiso para ampliar el centro comercial Bilbondo (Basauri).
El recurso de casación presentado por la cadena de supermercados e hipermercados cuestionaba una sentencia del TSJ del País Vasco de finales de 2019, que le daba la razón pero de forma parcial, ya que la indemnización fijada era casi una cuarta parte de la que solicitaba. En su dictamen, el Supremo desestima la pretensión de Eroski, que calcula esos 9,6 millones de compensación en base a un informe pericial.
Los jueces de la Sala de lo Contencioso-Administrativo alegan en su fallo que el recurso tiene un "difícil encaje" por esta vía al sustentarse "en una discrepancia sobre la valoración probatoria", que en este caso además se basa en una estimación sobre el lucro cesante -es decir, el dinero que dejó de ganar-. Su decisión de no admitir a trámite la pretensión de Eroski confirma "de facto" la condena al Gobierno vasco, que deberá abonar dos millones a la cooperativa. El origen del caso se remonta a 2009, cuando una federación de asociaciones de comerciantes de Bizkaia protestó judicialmente contra la ampliación del centro comercial de Bilbondo.
Los magistrados del TSJ del País Vasco argumentaron que el Gobierno vasco "tenía la obligación de acomodar su normativa a las disposiciones del Derecho de la Unión Europea", en concreto a una directiva de 2006 que abogaba por el libre comercio, "y no lo hizo" porque tomó la decisión de "dar protección unos determinados intereses económicos frente a otros". "A partir de ahí, la Administración debe asumir las consecuencia de sus actos", según indica.
Aunque Eroski pedía 9,6 millones de euros, la indemnización se fijó en dos millones por ser ésta la cuantía que dejó de percibir cuando vendió el centro comercial a un fondo inmobiliario en 2010, ya que en el contrato existía una cláusula que establecía el pago de ese importe si se llevaba adelante el proyecto de ampliación de las instalaciones. Los magistrados fundamentaron esta decisión en la consideración de que "no ha quedado acreditado ningún perjuicio adicional que merezca ser indemnizado".