La confirmación de la fábrica de coches eléctricos en Navarra da alas a BasqueVolt

La ministra de Industria, Reyes Maroto, ha asegurado en el Congreso de los Diputados que "Navarra tendrá coche eléctrico". Es un anuncio que ha realizado para confirmar que la fábrica de la planta de Volkswagen contará con el respaldo para esta producción que el Gobierno impulsará a través de los Fondos Europeos. Se trata de un anuncio que refuerza el consorcio Battchain en el que se encaja la fábrica de baterías de BasqueVolt y que contempla la elaboración de estos dispositivos para su ensamblaje en Navarra para la instalación en los vehículos. El avance del proyecto supone un espaldarazo a los planes para Euskadi. Así, CiC Energigune, ha constituido la sociedad BasqueVolt para seguir dando pasos, una vez que el Gobierno vasco anunció que ha pedido la ampliación del Parque Tecnológico de Miñano (Álava) para instalar allí la infraestructura. 

BasqueVolt está diseñada dentro de un plan que contempla todo el ciclo de creación de estos componentes enfocados a la automoción eléctrica. El proyecto está incluido en el Plan Euskadi Next Generation EU que recoge los proyectos que el Ejecutivo autonómico ha presentado para obtener financiación de los Fondos Europeos, en concreto el Gobierno ha solicitado 217 millones para completar una inversión total de 707 millones que se desarrollaría con las Iberdrola, Petronor, Enagas, MCC, Irizar, Ingeteam, Ormazabal, CIE automotive, Solarpack. 

Hace dos semanas precisamente se reunían también en Bilbao el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, y el consejero delegado del Grupo Volkswagen y Seat, Herbert Diess, mantuvieron un encuentro para analizar los avances en la electrificación del automóvil y el impulso de una red de recarga pública y ver la fabricación de coches eléctricos en la planta de Landaben (Pamplona). 

El papel determinante de CiC Energigune

Una de las claves es la presencia de CiC Energigune en el Parque Tecnológico alavés y el desarrollo de sus líneas de investigación en la construcción y prueba de la "batería sólida", clave en su aplicación a la automoción. El objetivo es que Álava acoja una de las dos o tres gigafactorías que se precisa estarán en funcionamiento en España para 2030. CiC Energigune, desde Miñano, destaca por su capacidad en la fabricación de las celdas de la batería y forma un consorcio con varias empresas de diferentes comunidades para cerrar todo el proceso de extracción de materias primas, construcción de celdas y ensamblaje de baterías, así como el reciclaje de las mismas una vez agotadas

Consorcio Battchain

El proyecto de BasqueVolt está agrupado en el consorcio español Battchain. Se trata de una línea de trabajo que aúna a importantes empresas del sector como Iberdrola, Ingeteam. Fagor Ederlan o Petronor y que agrupa también a las comunidades autónomas de Euskadi, Navarra y Extremadura. El proyecto comprende toda la cadena de valor, desde la extracción del litio en Extremadura, la construcción de las celdas de la batería en BasqueVolt, el ensamblaje de las baterías en Navarra donde participan Fagor e Ingeteam, así como el reciclaje de las unidades de carga una vez agotada su primera vida. 

Para lograr el desarrollo de la iniciativa se hace necesario contar con numerosa inversión público privada en desarrollo del espíritu de los Fondos Europeos y de su Mecanismo de Resistencia y Resiliencia (MRR). Es por eso que en estos días se intensifican los contactos entre empresas y administraciones para tratar de elaborar el plan más sólido y completo para pujar con una de esas fábricas. Las capacidades logísticas de las diferentes sedes, la cercanía de los yacimientos de litio, la ubicación en centros de automoción o la implicación de las instituciones será determinante en esta carrera. 

Hay al menos cinco iniciativas en España que pugnan por acoger una de las dos o tres gigafactorías que se estima serán necesarias para 2030. Se trata de proyectos lanzados en Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura o Galicia. La apuesta del plan energético y de movilidad de la Unión Europea, así como la Ley para el Cambio Climático recientemente aprobada en el Congreso de los Diputados, han certificado la defunción del coche de gasolina o diésel. Y es que a partir de 2040, ya no se podrán vender vehículos que generen emisiones de CO2 y, desde 2050, tampoco podrán circular. Se trata de un límite temporal que da el pistoletazo de salida al vehículo eléctrico, a pesar que todavía hoy el porcentaje de coches de este tipo fabricados es del 0,06% respecto al total. Este cambio de paradigma ha disparado los proyectos de gigafactorías en Europa y, por ende en España, donde la previsión es que la demanda actual de baterías en 2030 sea de 75 GWh, lo que haría necesarias dos o tres instalaciones de este tipo, tal y como señalan la directora general de CiC Energigune, Nuria Gisbert, y el analista de negocio de BCare, Íñigo Careaga. Entidad que también participa en el proyecto.