Después de Mercedes anunciase el pasado jueves un redoble de su inversión en la factoría de Vitoria con una inversión de 1.200 millones de euros, siempre que se alcance un acuerdo laboral en la planta, el diputado general de Álava, Ramiro González, ha hecho este martes un llamamiento para que ese acuerdo se logre cuanto antes. González ha insistido en que el territorio depende de que se materialice la apuesta de duplicar la capacidad de la planta alavesa planteada por la dirección de la multinacional alemana.
El diputado general ha remarcado que "es hora de hablar menos y acordar más", dado que el movimiento también puede resultar clave para atraer a la nueva Vito eléctrica junto al de Basquevolt, y ha pedido que todos los implicados en las negociaciones actúen con "responsabilidad" desde el diálogo y el acuerdo. Así, ha subrayado que esa inversión, si llegara a concretarse, supondría una garantía para el futuro de Vitoria y Álava, para el empleo y para el futuro industrial del territorio.
Por su parte, los sindicatos UGT y Comisiones Obreras celebran el paso de la multinacional, aunque advierten que no es suficiente y que continuarán con su calendario de movilizaciones ante la falta de un convenio. Ambos sindicatos anunciaron un calendario de movilizaciones que incluían cinco jornadas de huelga como colofón si no se ratifica un convenio "que se lleva negociando ya 18 meses", advirtieron el pasado jueves.
La llegada de la inversión alemana, según un comunicado de Comisiones Obreras emitido la semana pasada, va vinculada a "un acuerdo de futuro en la negociación del convenio colectivo". La dirección ha prometido avances si se paralizan las movilizaciones para presionar el acuerdo laboral. Para ello, dirección y sindicatos van a reunirse los próximos días 9, 14, 15 y 17 de este mes.