Iberdrola canaliza 94 millones a través del 64bis mientras Petronor no lo ha usado en cinco años

Con una nueva reforma fiscal a la vista, el 64bis cumple cinco ejercicios fiscales. A falta de que las empresas pasen por caja en 2023 para cuadrar con el fisco las cuentas de 2022, las Haciendas forales llevan ya cinco años ofreciendo a las empresas la posibilidad de aplicarse deducciones fiscales financiando proyectos de su red de proveedores. En el caso concreto de Bizkaia, este artículo ha hecho que se canalicen 86,5 millones de euros a través de 274 proyectos según detalló el diputado foral de Hacienda, José María Iruarrizaga, en Juntas Generales.

El artículo, que ofrece ventajas a ambas empresas y que ha sido puesto por los propios Gobiernos forales a disposición de las startups cuando se les intenta convencer para venirse a Euskadi, ha tenido, sin embargo, atractivos distintos para las grandes empresas. Los grandes contribuyentes del fisco vizcaíno, por ejemplo, han recurrido a este mecanismo de formas radicalmente opuestas. Mientras Iberdrola suma un total de 94 millones a través de 17 programas, Petronor no ha hecho uso de ese mecanismo fiscal en los cinco ejercicios fiscales que lleva en vigor. Así lo aseguran fuentes de ambas compañías contactadas por este periódico.

En el caso de Iberdrola, que suele poner un tercio de los que se destina a cada programa, con empresas de distinta índole. Los de Sánchez Galán han pasado por hasta apoyarse a startups como Barbara IoT para digitalizar sus infraestructuras hasta acometer el proceso de sensorización de centros de transformación con empresas de la envergadura de Ormazabal.

"Es un mecanismo que nos permite aprovechar mejor las oportunidades que ofrece la transición energética", asegura en conversación con este periódico Roberto Mariscal, director de Innovación de Iberdrola España. Es su división la que más se beneficia de este tipo de inversiones, que cuentan en Iberdrola incluso con una directora del programa de inversiones que se planifican a través de este artículo fiscal: Ana Yurena. "Nos permite incorporar nuevos proveedores y generar un círculo virtuoso", afirma a preguntas de 'Crónica Vasca'.

Maquinaria de Ormazabal para Iberdrola / Ormazabal

Socios industriales

El artículo en sí es una idea muy resolutiva para cliente y proveedor: uno desgrava carga tributaria y el otro se puede lanzar a por proyectos de innovación que quizá no podrían hacer de no contar con el respaldo de un socio que no solo ejerce un papel financiero, sino también industrial. "Nuestro objetivo pasa por generar nuevos productos aquí en Bizkaia para luego moverlos por todo en mundo", defiende Mariscal. Y es que esa es una de las principales ventajas: que el desarrollo del I+D ya tiene una cartera de pedidos aseguradas antes incluso de escalar a la producción industrial.

Sobre el artículo, Mariscal argumenta que "es perfecto" por cuatro razones: "porque canaliza inversión", "está bien diseñado", "es fácil de usar" y aporta "seguridad jurídica". Dos palabras estas últimas que se han convertido en clave para las grandes corporaciones de Euskadi y del resto de España en un contexto donde los impuestos a energéticas y banca ha hecho que el peso del país en las inversiones de algunas grandes empresas se haya visto reducido. En el caso de Iberdrola, de un gran programa de inversiones públicas: 47.000 millones de euros, cerca del presupuesto del Gobierno vasco... juntando los tres años de legislatura ya consumidos.

El sistema es sencillo: sin avales, el acuerdo entre empresas se firma en un solo contrato. En el caso de Iberdrola, los proyectos, además de ser seguidos de cerca por las reuniones habituales entre empresa y proveedores -"interacción industrial" lo denomina Yurena-, "se va siguiendo año a año", ya que la empresa financiada va presentando ante la propia Hacienda vizcaína un informe de certificación de cómo está ejecutando ese dinero canalizado a través del 64bis.

El CEO de Iberdrola España, Mario Ruiz-Tagle, durante la jornada de presentación del 64bis en la Torre Bizkaia / Iberdrola

Un interés creciente... y con más financiación a la vista

En el caso de la energética bilbaína, la iniciativa fiscal y su programa creado a merced del 64bis ha sido recientemente presentado ante las startups que se han ido instalando en el centro de emprendimiento de la Torre Bizkaia. Desde entonces "han llegado más cosas al buzón", señala Mariscal. Ahora el objetivo de la empresa es seguir exportando el sistema a más áreas y más empresas además de seguir profundizando en los sectores que ya son marca de la casa en Iberdrola: redes inteligentes, movilidad eléctrica, renovables. De ahí que en la empresa no se descarte alguna presentación más a lo largo del año, aunque se quiere hace especial hincapié en la Innovation Week que en 2022 ha celebrado por primera vez Iberdrola en su centro de redes inteligentes de Larraskitu y que pretende repetir este año.

A los 47.000 millones del actual plan inversor hay que sumar la financiación del próximo plan inversor, que empezará a aplicarse a finales de 2025, que ya se está empezando a diseñar y que traerá otro puñado de millones en innovación y transición energética en busca de más soluciones de I+D. "Algunos de los proyectos actuales ya estarán en ese plan porque ahora están en fase de desarrollo", sostiene Yurena, a lo que hay que sumar, en los tres años que aún quedan de este plan el dinero que se espera que llegue de los PERTE.