Semanas después de que Juliette, la última borrasca del invierno, rompiera las amarras del ‘Penguin 2, este artefacto flotante permanece semihundido en el Puerto de Bilbao, en el mismo lugar y en la misma posición, tras haberse estampado contra el dique de Sollana, en Zierbena.

El pasado 27 de febrero, el Puerto de Bilbao notificó a sus propietarios, la empresa finlandesa Wello, todos los problemas, daños y perjuicios ocasionados por su embarcación y les solicitó su retirada por “riesgo inminente de hundimiento.

Además, hay que recordar que el ‘Penguin 2’ lleva abandonado en el puerto desde diciembre de 2021, hace más de 14 meses, desde que llegó procedente de la plataforma de BiMEP (Biscay Marine Energy Plataform), tras dar por concluidos sus ensayos.

Este dispositivo flotante, con 23 metros de manga, 43 de eslora y un casco giratorio central de 150 toneladas, había sido diseñado para convertir el movimiento de las olas en energía eléctrica y había elegido las instalaciones de Armintza para llevar a cabo sus pruebas durante un periodo de dos años.

'Penguin 2', el barco finlandés abandonado en el Puerto de Bilbao está prácticamente hundido. / CV

Un proyecto interrumpido abruptamente

Sin embargo, desde su llegada a la plataforma, en julio de 2021, hasta su retirada, en diciembre de ese mismo año, apenas pasaron seis meses a causa de un supuesto fallo en este dispositivo que hizo que Wello paralizase sus ensayos.

Esta avería parece haber hundido los planes de Wello, que pretendía aprovechar la energía de las olas para transformarla en energía eléctrica, pero que a la vista está que no ha resistido los vaivenes y la virulencia del mar, que han terminado por hundir un proyecto del que a fecha de hoy únicamente asoma la quilla.