FCC avanza los trámites para la primera de las ampliaciones de vertederos tras la crisis de Zaldibar
El proyecto busca alargar tres años más la vida del centro de residuos de Lemoa dentro del plan del Gobierno vasco para ganar capacidad de vertido
5 abril, 2023 05:00La empresa FCC (Fomento de Construcciones y Contratas) vuelve a intentar dar salida al proyecto de ampliación del vertedero de Bistibieta, en Lemoa. Una instalación que ha recibido críticas sociales, de hecho en más de una ocasión ha estado sobre la mesa de las instituciones su cierre, pero que es ahora una pata importante dentro del plan vasco de reparto de los residuos a corto plazo.
El Gobierno vasco presentó a finales del pasado año una hoja de ruta que pasa por ampliar varios vertederos, entre ellos el de Lemoa, y recuperar otros como el de Artxanda, en Bilbao, o el de Bergara como alternativa para ganar espacio para residuos no peligrosos tras los cierres de instalaciones como la de Zaldibar, en este caso a raíz del derrumbe que acabó con la vida de dos trabajadores.
En concreto, el proyecto para Lemoa que encabeza FCC Ámbito tiene por objetivo poder ampliar la capacidad de Bistibieta en 230.000 metros cúbicos con el objetivo de mantener el nivel de actividad actual tres años más, tal y como señalan desde la propia compañía. El fin de la vida útil de Bistibieta llegaría por tanto en 2027, fecha prevista en el plan de reordenación de Lakua, que recoge también el cierre en 2024 de Batearte, en Mallabia, en 2025 de Epele, en Bergara, y en 2030 el fin de ciclo del 'resucitado' vertedero de Artxanda.
Es este último uno de los centros que más capacidad total permitirá aportar al conjunto de vertederos vascos a corto plazo con 1,2 millones de toneladas de residuos, una reapertura también muy cuestionada por asociaciones vecinales y ecologistas. Por ahora, el ayuntamiento de Bilbao da luz verde al proyecto. Las otras ampliaciones previstas en el plan del Gobierno vasco serán las de Mallabia e Igorre, este último con una capacidad muy abultada.
Ampliaciones polémicas
Euskadi cuenta con falta de espacio para arrojar residuos a raíz de los cierres de Mutiloa, Larrabetzu y el propio Zaldibar, de forma que se tienen que desviar basuras a otros territorios (el Gobierno vasco cifró este déficit el año pasado en unas 400.000 toneladas). La previsión, eso sí, pasa por un progresivo descenso del volumen total de vertidos que permitirá ir acotando este déficit para, a partir de 2030, tener un dibujo completamente distinto de forma que los vertederos operativos en Euskadi se podrán contar con los dedos de una mano: dos en Bizkaia, uno en Gipuzkoa y otro en Álava.
Pero hasta entonces hay un camino por recorrer que no va a estar exento de polémica. Los consistorios de Igorre y Lemoa, ambos gobernados por EH Bildu, ya mostraron su inquietud ante el anuncio de que sus respectivos vertederos podrán acoger más basura. En el caso concreto de Bistibieta, desde FCC se traslada que el consistorio vizcaíno está al tanto de esta ampliación, que ha ido superando trámites hasta llegar ahora a la fase de alegaciones.
Será ahora por tanto cuando deba pronunciarse el ayuntamiento de Lemoa y, en su caso, asociaciones ecologistas que puedan querer mostrar su rechazo a la ampliación. Todo ello en un momento delicado para la política local por la proximidad de las elecciones del 28 de mayo, unos comicios que condicionan enormemente el hacer cualquier movimiento sobre este asunto en los próximos 30 días, plazo para presentar alegaciones. Además están los festivos de Semana Santa de por medio, un periodo en el que la actividad municipal está bajo mínimos.